Los periodistas españoles piden ayudas públicas para la prensa

Alejandro Posilio

SOCIEDAD

14 abr 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Las solicitudes de ayudas públicas para el sector de la prensa continúan aumentando. Ahora es la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) la que reclama que las Administraciones acudan en apoyo de un sector que está respondiendo a las crisis económica con despidos de sus trabajadores. Según los datos del Observatorio de la Crisis, entre junio del 2008 y abril de este año 2.221 periodistas se han quedado sin trabajo debido a la coyuntura económica. Esta organización pretende denunciar decisiones oportunistas injustificadas o abusivas.

La petición de la FAPE se une a la de la Federación Europea de Periodistas (FEP), que la semana pasada se dirigió al presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durão Barroso, y a los grupos de la Eurocámara, para solicitarles en sendas cartas que se comprometan en la adopción urgente de medidas para defender a las empresas periodísticas de la crisis del sector.

En estas misivas, el presidente de la FEP, Arne Koening, pide que se actúe en favor de la profesión «antes de que sea demasiado tarde», ya que el periodismo es «un puntal de la democracia europea» y tiene tanto derecho o más a ser protegido que el sector de los bancos o las compañías automovilísticas.

«La democracia -se señala en los escritos- requiere una información viable como un bien público. Esto implica que necesitamos gente y recursos para producirlo y ponerlo en circulación. El periodismo y sus profesionales deben ser protegidos y animados a desarrollarse».

La FAPE se ha sumado a estas peticiones e insta a los partidos políticos a que las tengan presentes en sus programas electorales al Parlamento Europeo, de cara a los comicios del 7 de junio. Magis Iglesias, presidenta de esta asociación, recuerda, además, que ha insistido al Gobierno español en la necesidad de «un plan estatal para librar al periodismo de las garras de la crisis».

Mantenimiento de empleo

En la Declaración de Sevilla, firmada el pasado 14 de marzo, los periodistas españoles hacen un llamamiento expreso a las Administraciones para que arbitren las ayudas públicas demandadas por los empresarios, siempre que vengan condicionadas al mantenimiento de los puestos de trabajo de los periodistas.

«Es preocupante que las regulaciones de empleo puedan afectar a la calidad de los productos informativos en la medida en que los descapitalizan profesionalmente», subraya dicha declaración.

Con este fin, la FAPE respalda la solicitud de una mesa parlamentaria para analizar la crisis de los medios, cuya convocatoria ha exigido reiteradamente el presidente de la Asociación de la Prensa de Madrid (APM), Fernando González Urbaneja.

Todo esto se produce porque la crisis económica está afectando duramente a los medios españoles ante la acuciante bajada de ingresos por publicidad. De hecho, el rotativo gratuito Metro ya ha cerrado, mientras que diarios nacionales como ABC o El Periódico negocian importantes planes de reducción de plantilla. El País, primer diario nacional de pago, anunció el pasado 30 de marzo un incremento de su precio de 1,10 a 1,20 euros, para hacer frente a la caída de ingresos publicitarios (un 20% menos que en el 2008).

Según la APM, la recesión económica que afecta a España podría suponer la pérdida de 5.000 puestos de periodistas de aquí al 2010, lo que supone el 20% del empleo del sector.