20 dic 2009 . Actualizado a las 02:00 h.
Carmiña Pintos, viuda del que fuera alcalde de Cambados, Joaquín Fole, es la madre de las tres niñas que tuvieron que recibir a De Gaulle y a su mujer flores en mano: Herminia (Minucha); Marta, que vive en el Reino Unido; y Noel. Carmiña recuerda una anécdota relacionada con aquel hombre «altísimo». En el Ayuntamiento tuvieron que ingeniárselas para conseguir un biombo, solicitado expresamente por el general para su estancia en el Parador. ¿Y por qué tanto interés en un biombo? Carmiña se ríe: «En esos años, De Gaulle estaba escribiendo sus memorias, algo que también hizo mientras se alojó en Cambados. Luego se supo que le gustaba escribir en calzoncillos, por eso pidió el biombo, para que nadie lo viese en semejante tesitura».