La torre de la Berenguela será restaurada con urgencia ante su grave deterioro

Tamara Montero
Tamara Montero SANTIAGO/LA VOZ.

CULTURA

La Xunta destinará casi 500.000 euros a los trabajos, que deberán realizarse en un máximo de 12 meses

13 ago 2010 . Actualizado a las 10:50 h.

Son muy pocos los que no alzan la vista en la rúa do Vilar de Santiago para admirarla, y muchas las leyendas a su alrededor. Sin embargo, la Torre do Reloxo no pasa por su mejor momento. Al menos eso es lo que deja ver el proyecto de restauración de la Berenguela, que se llevará a cabo en un plazo máximo de 12 meses ante la necesidad urgente de actuación y que contará con un presupuesto cercano al medio millón de euros repartido en dos anualidades.

El Diario Oficial de Galicia publicaba ayer el anuncio de licitación de los trabajos -que según los plazos marcados en la convocatoria podrían comenzar antes de que termine el año- que repararán las múltiples deficiencias que presenta la estructura. Desde suciedad y vegetación abundante en las cornisas, terrazas y cúpulas de los miradores, que además de afear facilitan las filtraciones de humedad, hasta el deterioro de la piedra por la acción de las sales, pasando por problemas tan acuciantes como la rotura de sillares y piezas escultóricas. De hecho, hay fracturas graves en algunas pilastras, en la sujeción de las esferas de los relojes y en la linterna que durante la noche ilumina el cielo compostelano y señala la tumba del Apóstol.

De hecho, la linterna es la que presenta más problemas. Al parecer, el sistema de iluminación que se ha instalado está obsoleto tanto técnicamente como por su efecto visual, y resta transparencia al conjunto. Por eso, abogan por la colocación de proyectores en la base de la linterna.

El sistema de iluminación no convence a los expertos, que tampoco están conformes con la tecnología radioeléctrica. Critican con dureza el alquiler del espacio para instalar un repetidor de televisión, cuyo cuadro eléctrico también afea el conjunto. El dispositivo será retirado.

A pesar de que los trabajos de restauración se centrarán en el exterior de la Berenguela, el interior también reclama atenciones. En especial el acceso a la linterna. No en vano, actualmente hay una escalera de hierro -que será retirada- «con un trazado discordante» con la de caracol que existía previamente, cuyos restos serán restaurados para poder recuperar su uso. Finalmente, se fijará un plan de conservación.