Los personajes femeninos de García Lorca vestidos en el Museo del Traje

La Voz

CULTURA

Así, la austeridad de Bernarda Alba aparece realzada por los tonos oscuros

28 ene 2010 . Actualizado a las 18:53 h.

«El teatro necesita que los personajes que aparezcan en la escena lleven un traje de poesía», escribía García Lorca. Y eso es lo que han llevado a cabo Mar Garrido y Luis Casablanca al reproducir, con delicadas esculturas de papel y fotografías, los personajes más simbólicos del universo lorquiano.

«Ausencias vestidas & reflejos desnudos. A Federico García» es el título de esta exposición, que se ha inaugurado en el Museo del Traje y en la que Bernarda Alba, Rosita la Soltera, María Josefa, Adela, Belisa, Soledad Montoya o la Zapatera prodigiosa toman cuerpo y vida a través de los trajes y las fotografías que recuperan la profundidad de sus caracteres y de su entorno.

Una exposición que se abre con un vídeo con el que los espectadores podrán adentrarse en el universo lorquiano, inspirado por el paseo por la Vega de Granada, pueblo al que pertenecía Fuente Vaqueros, donde el poeta, dramaturgo, pintor y músico nació y vivió los primeros diez años de su vida.

Sus paisajes y árboles son la puerta de entrada de una muestra que nació gracias a una frase que pronunció Luis Casablanca: «Bernarda es la negación del deseo».

Esta frase estimuló y germinó en la mente de estos dos creadores, que viven en Granada y que, hartos de tanto tópico y tantos lugares comunes sobre Lorca en Granada, se pusieron a investigar la vigencia de los caracteres de los personajes femeninos de un Lorca que amó el teatro por encima de todo, lo renovó y lo difundió con el grupo de teatro universitario ambulante «La Barraca» durante la República.

«Los personajes de Lorca son de una hondura asombrosa. Hoy te puedes encontrar con personas de idénticos problemas al lado, en cualquier pueblo, porque (los personajes lorquianos) hablan de la condición humana, como las tragedias griegas», explica a Efe Luis Casablanca, profesor de la facultad de Bellas Artes de la Universidad de Granada, con años de experiencia por su trabajo realizado en los talleres de Jesús del Pozo como dibujante adjunto.

Las esculturas realizadas en papel de seda, artesanales, cartón, terciopelo y cartón se mezclan con las fotografías, que hacen alusión a la escenografía de sus vidas.

Así, la austeridad de Bernarda Alba aparece realzada por los tonos oscuros, y acompañada por los colores también oscuros de las fotografías con las que Mar Garrido, profesora titular de la facultad de Bellas Artes de Granada y artista que trabaja con la fotografía y la videocreación, ha querido captar «el frío y el calor de la sensibilidad del personaje».

El color de la tierra yerma y seca y los colores verdes, otoñales, rojizos, fuegos y caldeados visten a estas mujeres y su entorno fotográfico.

Tanto a Mar Garrido como a Luis Casablanca les gustaría que esta muestra pudiese recorrer algunas de las sedes del Instituto Cervantes que hay por el mundo, «para que se pueda conocer fuera a otro Lorca».