Vendido «Fuego en el batey» de Mario Carreño por 2,18 millones de dólares

EFE

CULTURA

Pintada en 1943, la obra estaba valorada en un millón de dólares y, después de haberse dado por desaparecida durante años, fue redescubierta en Long Island (Nueva York).

29 may 2009 . Actualizado a las 09:53 h.

La casa de subasta Christie's adjudicó hoy «Fuego en el batey», del cubano Mario Carreño (1913-1999), por 2.188.100 dólares, en la primera de sus dos jornadas dedicadas exclusivamente al arte latinoamericano.

Pintada en 1943, la obra estaba valorada en un millón de dólares y, después de haberse dado por desaparecida durante años, fue redescubierta en Long Island (Nueva York).

«A partir de una visita a México, Carreño se interesa por el muralismo desde un punto de vista narrativo, pero será en Cuba donde más tarde realizará unas quince pinturas en duco», explicó a Efe el director del Departamento de Arte Latinoamericano de Christie's, Virgilio Garza.

El experto detalló que esta obra «estuvo perdida desde entonces hasta que la encontramos en una residencia de Long Island a partir de una llamada telefónica del propietario».

Garza añadió que «precisamente por la naturaleza del duco, que es un esmalte que se seca muy rápido, Carreño tenía que pintar a gran velocidad y tomar decisiones sobre el lienzo, ya que no había tiempo de hacer esbozos».

«El resultado que logra es fabuloso por la paleta que usa, que hace que la obra parezca muscular», según Garza, quien consideró que «por la manera en la que está pintada, por la resolución técnica y por el tema, es uno de los iconos de la pintura cubana».

Otra obra de Carreño sin título se vendió por 146.500 dólares, mientras que su cuadro «Diálogo rojo y negro» se adjudicó por 158.500 dólares durante esta subasta, que continuará el viernes.

En estas dos jornadas dedicadas al arte latinoamericano se podrían superar los 14 millones de dólares, según calcula la casa organizadora, que en total ofrecerá 276 lotes en obras que abarcan desde el arte colonial del siglo XVII hasta pinturas contemporáneas.

Otra de las obras que más expectación generó hoy fue «Autorretrato» del mexicano Diego Rivera (1886-1957), que se vendió por 1.022.500 dólares.

Fue pintado en 1941, dos años después de que el ingeniero y coleccionista Sigmund Firestone, de Nueva York, conociera a Rivera y a Frida Khalo en un viaje a México y, tras establecer una amistad con ambos -que se mantuvo luego por correspondencia-, éste les encargara sendos autorretratos.

La obra estaba valorada entre 1,2 y 1,8 millones de dólares y en ella se puede ver a un Rivera de 55 años que sostiene una nota en la que se puede leer: «A mi querido amigo Sigmund Firestone. Diego Rivera. 1 de enero de 1941».

Junto a la obra, que fue seleccionada como portada del catálogo de esta temporada de subastas de arte latinoamericano de Christie's, se vendieron 14 cartas que intercambiaron Rivera, Khalo y Firestone.

También se vendió por encima de su valor previsto «La Gigante», una obra conocida igualmente por «La Guardiana del Huevo» de la británica Leonora Carrington, pintada alrededor de 1947 y adjudicada finalmente por 1.482.550 dólares, frente a la horquilla de entre 800.000 y 1,2 millones de dólares en que estaba valorada.

Esta pintura de gran tamaño sirvió de portada del folleto de la exposición de Carrington que se organizó en 1948 en la galería Pierre Matisse de Nueva York.

La obra surrealista, con elementos marinos, muestra la flora y la fauna de la tierra, el mar y el cielo y, según la casa de subastas, en ella Carrington «encarna su fascinación por la mística de la feminidad y los encantos del mundo cósmico».

Del mexicano Rufino Tamayo (1899-1991) también se sacaron a la venta cinco obras realizadas entre 1940 y finales de 1980, entre ellas «Personajes frente a la ventana», que se vendió por 338.500 dólares.

«Composición» y «Composition» del uruguayo Joaquín Torres García (1874-1949) se vendieron por 302.500 y 422.500 dólares, respectivamente, y «Les Separés vivants also known as Funfural» del chileno Roberto Matta (1911-2002) por 494.500 dólares.

«Oiseau sur la terre» y «Non combustible», ambas del cubano Wifredo Lam (1902-1982) llegaron a los 266.500 y 386.500 dólares, respectivamente, mientras que «Menino sentado» del brasileño Candido Portinari (1903-1962) alcanzó los 218.500 dólares.