Kiko Rivera: «He vivido cosas en Galicia que no he visto en ningún otro lugar»

YES

Fabio Perez Martiin

El DJ retornaba a la escena musical con «El Mambo» y con uno de sus mejores veranos en el horizonte antes de ser hospitalizado. Explica ahora que intentará reprogramar todas las fechas, incluidas las que tenía aquí. Esta entrevista se hizo el día anterior a la publicación del tema y de que el artista sufriera un contratiempo coronario

20 jul 2023 . Actualizado a las 15:36 h.

Con motivo del estreno de su último tema El Mambo, KiKo Rivera (Sevilla, 1984) tenía la agenda llena en este verano. Un problema coronario lo va a tener apartado durante algún tiempo de su público, pero su equipo explica que se va a intentar reprogramar todas las citas, incluidas las de Galicia. Hablamos con el DJ el día anterior a la publicación de su nuevo tema y a que el artista tuviera que ser hospitalizado

—Preséntanos «El Mambo». ¿Qué quieres transmitir con esa canción?

—Es una canción que transmite toda la alegría del mundo y mucha fiesta, musicalmente hablando. Espero que la gente la disfrute al máximo nivel.

—¿Va a ser la canción del verano?

—No sé si lo será o no, pero va a ser candidata, seguro. Va a ser imposible que haya una fiesta en la que no suene. Es una canción que recuerda a aquel primer tema que saqué, Quítate el top, que es la canción más alegre que he sacado. Luego me encasillé un poquito en música un poco más romanticona y más lenta. Con esta he vuelto a mis orígenes.

—¿Contabas con tener un verano con tantas actuaciones o ha sido una sorpresa para ti?

—Después de 12 años dedicándome al mundo de la música, tengo que reconocer que todos los años han sido buenos, pero que este está siendo muy especial. Porque después de todo lo que me ha pasado, que la gente siga confiando en mí, pues oye, es motivo para estar muy contento.

—Con Galicia siempre has tenido mucha conexión. ¿Qué significa para ti nuestra tierra?

—Mira, yo siempre recuerdo un día que iba a actuar en un pueblo cerca de A Coruña y a la hora de la actuación, que era al aire libre, llovía, pero de verdad, como llueve ahí. Yo pensaba que la iban a suspender. Cuando llegué a la plaza me impactó muchísimo porque estaba a rebosar. Todo el mundo con sus paraguas, pero nadie se iba. Cuando yo vi aquello, y aunque el promotor me comentó que podíamos suspenderlo, yo le dije: «Tengo que salir». Cuando salí, el público tiró los paraguas y daba igual la lluvia, el agua... La gente se pegó una fiesta de locos. A la media hora dejó de llover, yo creo que por obra del Señor. Fue un premio a esa gente tan especial que había allí. No he vivido nada así en ningún otro lugar. Ese día me enamoré de Galicia y entendí que los gallegos estáis hechos de otra pasta.

—¿Cómo es un «show» de Kiko Rivera?

Yo llevo muchísima música en mi pendrive y dependiendo del tipo de ambiente que haya, voy improvisando, poniendo una música u otra. Lo que siempre suenan son mis canciones. Llevo las bases y canto por encima. Porque al final la gente viene a verme a mí y lo que busca también es eso.

—¿Qué canciones no puedan faltar en una sesión tuya?

—Si nos vamos a temas actuales, tienes que meter a Quevedo, Rosalía, Saiko, Omar Montes, RVFV... Y luego yo soy muy de de los inicios del electrolatino: de Juan Magán, Henry Méndez...

—¿Y cuáles tienes en la lista negra, esas que nunca pones?

—No tengo artistas en la lista negra. Yo como DJ me tengo que basar en lo que el público demanda. Y si piden algún artista determinado, me guste a mí más o menos, lo tengo que poner.

—Este verano vuelves a salir de gira. ¿No le temes a los peligros de la noche?

—Físicamente estoy mucho mejor que tiempo atrás. Pero sí, la noche tiene su peligro, como todo el mundo sabe. Hay que andarse con mucho ojo. Yo hace ya tiempo que voy a trabajar y cuando acabo me marcho para el hotel a descansar. Años atrás sí que me quedaba pegándome la fiesta y al final me ha pasado factura. Ahora disfruto la vida desde otro punto de vista.

—¿Quién es hoy el rey del mambo?

—Quisiera serlo yo. Y que las nuevas generaciones vean que, aunque uno ya tiene su edad, todavía tiene cuerda para rato y ganas de seguir haciendo música para que ellos se diviertan.