Ruth Mesonero enseña cómo hacer ramen, «el cocido gallego de Japón», sin desfallecer en el intento

Begoña Rodríguez Sotelino
Begoña R. Sotelino VIGO / LA VOZ

VIGO

Oscar Vázquez

La chef experta en cocina asiática impartió en el Mercado del Progreso un taller centrado en esta elaboración de moda

14 abr 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

El ramen, plato japonés que arrasa en el listado de tendencias gastronómicas actuales, es una especie de sopa «de apariencia sencilla, pero de compleja ejecución». Así lo resume Ruth Mesonero, que ayer impartió en el Mercado del Progreso un taller centrado en esta elaboración. La cocinera tiene más de una década de experiencia a sus espaldas (trabajó en varios países de Asia y abrió en Vigo el primer restaurante de comida asiática callejera, Chao Da, que se llevó la pandemia por delante). Para el curso, abierto a todo el mundo, con o sin experiencia en cocina, buscó «una receta relativamente fácil para hacer en casa», ya que como explica, a las que ella está acostumbrada llevan cocciones muy largas, a veces de más de doce horas a fuego lento, y mucha variedad de ingredientes que no siempre se consiguen fácilmente.

«Mi objetivo era lograr una receta de caldo de buena calidad a nivel usuario, no el caldo de pollo básico, que no es ramen. Es un plato que da trabajo, porque lleva el huevo cocinado y marinado, hay que hidratar setas, hacer el rulo de panceta bien prensado para cortarlo fácilmente, pero hay formas de simplificarla, que es lo que hemos hecho», manifiesta, satisfecha, tras finalizar la tarea con una docena de aprendices que luego degustaron sus propias creaciones.

Mesonero atribuye el éxito del ramen a una mezcla de factores. Por una parte, a que es un plato «bastante completo, con su caldito, la pasta entra bien, tiene algas, verduras carne... a mi me gusta decir que es el cocido gallego de Japón y creo que los gallegos nos llama un poco la atención por eso». La otra razón es que está de moda, ya que la gastronomía no es ajena a las corrientes que acercan al público novedades para probar.

La viguesa ya había impartido otro taller en este mercado. Como explica su gerente, Verónica Gómez, que a su vez lleva el puesto de la charcutería gourmet La Trufa y mientras lo cuenta despacha lonchas de guanciale, los talleres forman parte del programa de dinamización de los mercados que subvenciona la Xunta de Galicia para atraer público, sobre todo gente joven que nunca pisó una plaza. Y se llenan. Se anuncian a través de su web y se asignan por orden de inscripción. Mesonero volverá en breve a este mercado para dar otro curso. Puede que de noodles, de gyozas, o de nuevo de ramen, aún no lo han decidido.