Su presidente, Carlos Botana, y el de la patronal gallega, Juan Vieites, reivindican su importancia y ven injusta la exclusión de los mapas estratégicos de transporte
21 feb 2024 . Actualizado a las 01:56 h.El presidente de la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG), Juan Manuel Vieites, y el de la Autoridad Portuaria de Vigo (APV), Carlos Botana, se reunieron hoy con el objetivo de analizar asuntos de interés para ambas instituciones. La mejora de la conectividad del puerto de Vigo, la reorganización de sus espacios, la agilización del plan de usos y el desarrollo del plan de inversiones estuvieron sobre la mesa. Pero en la reunión surgió también un asunto que parecía olvidado: la reivindicación del puerto vigués como nodal dentro de las redes de transporte de Europa.
Se han cumplido trece años ya desde que aquel golpe de algo más que mala suerte. La Comisión Europea presentó en Bruselas en octubre del 2011 un plan de transportes que marginó a Vigo y a su puerto. El programa, que contemplaba 50.000 millones de euros de inversión en redes energéticas, digitales y de transporte, situó al de A Coruña como el principal de Galicia y primaba su conexión ferroviaria. Fueron muchas las voces que entonces pusieron el grito en el cielo y que reclamaron al Gobierno español una posición de firmeza para corregir la situación. Pero nada cambió.
Vieites destacó ayer en su reunión con Botana la necesidad de convertir a Vigo en puerto nodal dentro de la Unión Europea. Para ello, el máximo responsable de la patronal gallega sabe que sería fundamental agilizar los trámites administrativos y, sobre todo, contar con las infraestructuras necesarias. «Necesitamos un puerto más competitivo y eficiente», declaró Vieites, que abogó por reducir tarifas y mejorar los tiempos de carga y descarga. La mejora de la conexión ferroviaria con la meseta y con Portugal, así como la ampliación de la terminal de Bouzas y el desarrollo de la plataforma logística de Salvaterra serían los primeros pasos.
Botana señaló que no renuncia a pelear ese reconocimiento por parte de Bruselas como puerto nodal, que «reflejaría su importancia estratégica para la economía gallega», ya que por sus muelles se reciben el 70% de las exportaciones y salen el 30% de las importaciones de la comidad autónoma vía marítima.
Ambos presidentes coincidieron en su encuentro en el buen funcionamiento de la autopista del mar hacia Brujas a través de Francia, una iniciativa que debería ampliarse para aumentar el tráfico de mercancías y servicios. La Autoridad Portuaria también avanzó que seguirá apostando por la integración puerto-ciudad, con nuevas ideas y proyectos que abran el litoral a la ciudadanía singularmennte en la zona de Beiramar.
Botana y Vieites no lo mencionaron, pero en los últimos trece años no solo no se ha avanzado en la potenciación del tren, sino que el Ayuntamiento de Vigo ha obligado a descartar la conexión ferroviaria con la terminal de Bouzas. Bruselas prima este sistema de transporte más ecológico, aunque el alcalde no aceptó que se partiese la ciudad en dos en esa zona y pidió al Gobierno que no contemplase el enlace dentro del proyecto de la llamada salida sur. Abel Caballero se mostró partidario de aprovechar la terminal de Guixar para ese cometido.