Testigos de Jehová rechaza las críticas de una exintegrante de la organización

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Asamblea de Testigos de Jehová en el Coliseum en una imagen del año 2002
Asamblea de Testigos de Jehová en el Coliseum en una imagen del año 2002

El colectivo religioso contesta a las acusaciones de Soraya Nárez, autora de «No somos parte del mundo»

12 abr 2024 . Actualizado a las 12:40 h.

La organización religiosa Testigos Cristianos de Jehová rechaza en un escrito enviado a esta redacción las acusaciones de la madrileña Soraya Nárez, que formó parte del colectivo hasta los 26 años y ahora, con 34, ha publicado el libro No somos parte del mundo.

La autora dice que una sentencia los considera «una secta destructiva» y Testigos replica que está recurrida y que «no hizo ningún reconocimiento de los hechos y solo dictaminó que, según la opinión de esta única jueza, la libertad de expresión protege el uso de tales expresiones».

La organización religiosa expone que «si un testigo de Jehová bautizado comete pecado grave los ancianos (pastores) intentarán proporcionarle ayuda pastoral cariñosa. Solo si el infractor no se arrepiente, los ancianos pueden decidir expulsarlo».

La entidad cita que «estudios académicos han demostrado que los testigos de Jehová ‘‘muestran un gran respeto por la dignidad humana''». Y añade que el número del 8 de marzo de 1993 de su revista ¡Despertad! «puso de manifiesto lo injusto e inapropiado que es hacer recaer la culpa en la víctima de una violación». También califica como «una distorsión de la realidad», afirmar que los padres deben estar dispuestos a sacrificar a sus hijos si Dios se lo pide.

Este colectivo afirma que cuando un miembro «desea rellenar la tarjeta de voluntades anticipadas, en la que expresa su rechazo a las transfusiones» de sangre, debe hacerlo junto a dos personas que certifiquen que está en pleno uso de sus facultades mentales y que no ha sido coaccionado.