Nacho Palau asegura que su relación con Miguel Bosé «no era abierta»

Joaquina Dueñas MADRID / COLPISA

SOCIEDAD

Nacho Palau
Nacho Palau Mediaset

Afirma que la separación de sus dos hijos de los dos que tiene el cantante le provocó «mucha tristeza», porque los niños «se quieren como hermanos»

22 jun 2023 . Actualizado a las 19:09 h.

Nacho Palau ha hablado después de que el Supremo rechazara su petición de reconocer a sus hijos y a los de Miguel Bosé como hermanos. El escultor, recuperado de un cáncer, ha contado cómo cambió el carácter del cantante después de tener a sus hijos y de cómo fue su relación durante los 26 años que estuvieron juntos. «Mi relación con Miguel no era abierta, aunque él diga que es infiel por naturaleza. Por mi parte era cerradísima», ha contado en Lecturas.

Tras su separación de Bosé lo más difícil ha sido organizar la custodia de los cuatro niños, dos de Miguel y dos de él, que se habían criado como hermanos pero que legalmente no lo son, por lo que en la actualidad viven separados. «Todo el mundo ha oído a Miguel decir que tenía cuatro hijos. Hay un montón de pruebas», relata. «Yo no quería que mis hijos se separaran», afirma, por lo que la decisión de la justicia le ha provocado «mucha tristeza». «Los niños se quieren como hermanos que son», asegura, al tiempo que reconoce que está «decepcionado y triste».

Tras el final del proceso judicial, Nacho y Miguel no han vuelto a hablar, aunque procuran que los niños se sigan viendo a pesar de vivir en países diferentes. «Se ven todos los períodos vacacionales», reconoce Nacho. «Pero claro, si a uno no le viene bien, ¿cómo haces para que se vean?», se pregunta. En todo caso, describe como «maravillosa» la relación con los niños que viven en México con Miguel Bosé, con los que habla habitualmente por videollamada.

Obsesivo y estricto

Para Nacho Palau poco queda del Bosé del que se enamoró. La paternidad y la educación de los pequeños cambió su carácter: «Miguel se volvió mucho más obsesivo, estricto, muy maniático, dictatorial. Todo se tenía que hacer como él decía. Es complicado», explica el escultor. «Si sonrío y se me pone cara de tonto es por el Miguel de antes. Han sido 26 años vividos, compartidos, de relación cerrada. No era abierta, aunque él luego haya podido decir lo que le da la gana. Por mi parte, era cerradísima. Él dice que es infiel por naturaleza», reprocha. «No nos teníamos que haber separado nunca, o haberlo hecho de otra manera, haber sido un poquito más generoso, más humilde. No siempre tiene que ser todo como tú quieres. Hay que pensar un poco en los demás», reflexiona Palau.

Después de más de un cuarto de siglo de discreta relación, la separación sacó a la luz los años que habían estado juntos y Bosé no llevó bien que su expareja rompiera su pacto de silencio. «Le jodió, sí, porque le planté cara», afirma a la vez que advierte que ha contado «muy poquito».