El CiTIUS y Plexus Tech se unen para crear la primera Cátedra de Inteligencia Artificial en Medicina Personalizada de España

La Voz

SANTIAGO

Senén Barro, director de la cátedra y del CiTIUS; Antonio Agrasar, fundador y CEO de Plexus Tech
Senén Barro, director de la cátedra y del CiTIUS; Antonio Agrasar, fundador y CEO de Plexus Tech LA VOZ

Tendrá una duración inicial de cuatro años y su objetivo es el de optimizar la calidad de la atención sanitaria mediante la individualización de los procesos asistenciales

24 ene 2024 . Actualizado a las 19:38 h.

Revolucionar la medicina a través de la Inteligencia Artificial (IA). Eso es lo que ha unido a la Universidad de Santiago de Compostela (USC), a través del CiTIUS, y a la empresa tecnológica Plexus Tech, principales valedores de la primera y única Cátedra de Inteligencia Artificial en Medicina Personalizada de España. La iniciativa ha conseguido el apoyo del Gobierno y una financiación de 1,2 millones de euros para una duración inicial de cuatro años. Durante los tres primeros, la Secretaría de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial aportará 900.000 euros, mientras que los 300.000 restantes los pondrá Plexus Tech.

«Existe un consenso generalizado sobre el hecho de que la Inteligencia Artificial está llamada a revolucionar la Medicina Personalizada de Precisión y, por extensión, el desarrollo mismo de la medicina del futuro», explica Senén Barro, responsable de la cátedra y director científico del CiTIUS. Bajo esa premisa nació un proyecto que concurrió a la última convocatoria nacional para financiar cátedras sobre IA, cuyo desarrollo entra en la Estrategia Nacional de Inteligencia Artificial (ENIA), en la agenda España Digital 2026, así como en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.

La cátedra centrará sus esfuerzos en reforzar la investigación en IA que ya realiza actualmente el CiTIUS, aunque incentivando aquellas líneas con mayor potencial para los proyectos de medicina personalizada. La principal prioridad será la adecuada explotación de los datos disponibles, ya que, a través de ellos, se espera aportar nuevo conocimiento y que contribuyan significativamente al proceso de toma de decisiones del personal clínico, poniéndose a su servicio como una suerte de inteligencia aumentada

Las posibilidades van desde el descubrimiento de fármacos, la identificación de biomarcadores, la caracterización de subpoblaciones, la estimación e inferencia causal de efectos al tratamiento, la comunicación o el intercambio de conocimiento. «El fin es la salud y la calidad de vida de las personas, pero en el medio están las máquinas y las tecnologías inteligentes», apunta Barro. La propuesta reconocida por el Gobierno suma una lista de 12 currículos brillantes que se sumarán al proyecto, y que corresponden con los de María Brión Martínez, Rosa María Crujeiras, María Isabel Loza, María Luz Couce, María José Alonso, María José Carreira, Senén Barro, Alberto Bugarín, Ángel Carracedo, Paulo Félix Lama, José Ramón González Juanatey y Wenceslao González. 

La vertiente económica del proyecto contará con el citado apoyo de Plexus Tech, empresa que desde el año 2000 viene desarrollando proyectos en todos los ámbitos tecnológicos, para los que cuenta con más de 3.000 profesionales altamente cualificados. En palabras de su fundador y CEO, Antonio Agrasar, «ser partícipes de esta Cátedra nos impulsa a ser conscientes de cómo podemos mejorar en este caso la medicina personalizada. Esto es un reto y a la vez un compromiso de nuestros equipos y nuestra compañía. Algo que nos hace sentir orgullosos y a la vez crecer como profesionales para lograr algo mucho más grande que un proyecto, algo que sin saberlo pueda llegar, si todo sale bien, a miles de personas que se beneficiarán de este esfuerzo que es a la vez nuestra recompensa».

El Cesga, segundo centro de supercomputación más potente de España, participará en un proyecto donde también estará el Sergas y el resto del ecosistema gallego de la sanidad y la tecnología. A través de la cátedra se promoverán otras líneas estratégicas como el aprendizaje automático, el procesamiento de imágenes y señales, así como las tecnologías lingüísticas.