Sanmartín abre contactos con el PSOE para negociar un acuerdo de gobierno para Santiago
SANTIAGO
Los socialistas se debaten entre la fórmula de apoyos puntuales o entrar en un tripartito
01 jun 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Hace ahora cuatro años, el entonces futuro alcalde de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo, iniciaba con Goretti Sanmartín una ronda de consultas informales con los grupos de la oposición de cara a decidir el formato del futuro gobierno municipal. Hoy es la alcaldable del BNG la que convoca la reunión con el PSOE para explorar la fórmula del nuevo mandato en Raxoi, con el que Sanmartín sucederá a Bugallo, desvinculado ya del proceso por voluntad propia después del revés electoral del domingo. A la cita de esta mañana en el hotel NH Collection acudirán Goretti Sanmartín, Míriam Louzao, Xesús Domínguez y Pilar Lueiro, por parte del BNG, y Mercedes Rosón, Xaquín Fernández Leiceaga, Mila Castro y Sindo Guinarte, en representación del PSOE.
Aunque la investidura de Sanmartín el próximo día 17 no está en juego, la negociación que ahora abre no se presenta sencilla. Frente a la disposición a entrar en un gobierno tripartito del otro interlocutor en juego, Compostela Aberta, los socialistas acuden a la reunión de esta mañana sumidos en un debate interno sobre su grado de implicación en esta nueva etapa. Y esas dudas enfrían la opción de fraguar el tripartito al que apela Goretti Sanmartín, quien desde la noche electoral del 28M ha evocado repetidamente anteriores experiencias de cogobiernos entre PSOE y BNG, y con los socialistas como fuera mayoritaria. Pero es que también el PSOE mira estos días por el retrovisor. El propio Bugallo lo hizo cuando todavía estaban desmontando el zafarrancho electoral en los colegios, al referirse al «bloqueo» por parte de la oposición de cuestiones que fueron determinantes en el anterior mandato, como la operación Peleteiro o el concurso sobre la gestión del agua. De hecho, estos siguen siendo asuntos espinosos sobre los que las tres fuerzas deberán aproximar posturas para allanar el acuerdo de gobierno, al margen del formato que finalmente decidan.
Si en el seno del PSOE se impone la posición de los partidarios de pasar factura al BNG por aquellas decisiones, es obvio que apostarán por quedarse fuera del gobierno y respaldar a Sanmartín con apoyos puntuales. Es decir, el mismo guion que los nacionalistas decidieron seguir en el 2019. Aunque también hay concejales socialistas que se inclinan por entrar en un tripartito.
Rosón y el interés de Santiago
A preguntas de los periodistas, Mercedes Rosón reivindicó ayer que los ciudadanos colocaron con sus votos al PSOE «nunha situación de paridade co BNG que hai que aceptar». A partir de esa igualdad, la virtual número uno de los socialistas en Raxoi —una vez que Bugallo avanzó que no recogerá su acta para el nuevo mandato— subrayó sobre la incógnita por resolver que «o grupo municipal está unido e valorando as distintas opcións». Mercedes Rosón proclamó que «a decisión tomarase exclusivamente en función dos intereses de Santiago e da cidadanía de Santiago». Y no concretó más: «Creo que está bastante clara a nosa postura e... sen présa. Mañá xoves [por hoy] teremos unha primeira reunión de contacto e a partir de aí decidiremos», recalcó.
Pero, al margen de lo que se trate en esa cita con Goretti Sanmartín, y de esa clave del interés compostelano a la que Rosón supedita la decisión sobre el futuro gobierno, tendrá un peso determinante el marco que la ejecutiva del PSdeG —el órgano que debe dar el visto bueno a todos los acuerdos— empezará a definir esta misma tarde en relación a las decisiones a adoptar a nivel gallego y en las ciudades.
Bugallo: «Non é sinxelo pechar un acordo. Pasaron cousas que non deberon suceder»
El ahora alcalde de Santiago en funciones, Xosé Sánchez Bugallo, considera que no será fácil que el PSOE pacte la entrada en un gobierno con el BNG. «Non é nada sinxelo pechar un acordo. No mandato pasado pasaron cousas que non deberon suceder», aseguró el todavía regidor socialista en Onda Cero, al ser interpelado por su opinión ante el inicio de los contactos para formar el futuro gobierno de Santiago. Bugallo advirtió al respecto que ese gobierno no se puede constituir sin aclarar previamente las posiciones sobre esos asuntos en los que la oposición adoptó en el último mandato decisiones con las que el socialista cree que se bloquearon proyectos clave para la ciudad, entre los que aludió a la finca del Peleteiro —ámbito en el que achaca «unha irresponsabilidade enorme» a BNG y CA—, al concurso sobre la gestión del agua y a las viviendas turísticas. «Vai requirir moito esforzo e moita xenerosidade por todas as partes», apostilló Bugallo sobre el acuerdo.
El portador del bastón de mando durante cinco mandatos, distribuidos en dos etapas, incidió en relación a una eventual continuidad en la política activa que sus aspiraciones están colmadas: «Para min non hai nada máis importante que ser alcalde de Santiago». Y dejó un recado a su sucesora: «Sei os problemas que vai ter a futura alcaldesa cando confronte as súas promesas coa realidade posible».