El vehículo monitoriza el giro de las cuatro ruedas individualmente, lo que ayuda y otorga confianza a los conductores al generar un par instantáneo y transmitir una potencia controlada en cualquier situación
19 dic 2023 . Actualizado a las 19:55 h.El Nissan Ariya es uno de esos coches que reflejan el salto tecnológico que ha dado la automoción con la nueva generación de vehículos eléctricos. Soluciones de vanguardia en el interior, como guanteras y consolas eléctricas o botones con retroalimentación háptica, y en el exterior, con una pintura que permite aplicar los colores a una temperatura más baja y reduce las emisiones un 25 % durante el proceso, son solo algunos ejemplos de cómo la marca nipona se sitúa en la vanguardia de la industria.
Pero este crossover de 4,60 metros de largo, con un diseño y acabado que combina aerodinámica y el estilo atemporal japonés, cuenta además con la exclusiva tecnología e-4ORCE, disponible en las versiones Advance y Evolve de 225 kW y en la Evolve+ de 290 kW. Gracias a e-4ORCE, el vehículo monitoriza el giro de las cuatro ruedas individualmente, lo que ayuda y otorga confianza a los conductores al generar un par instantáneo a las cuatro ruedas y transmitir una potencia controlada en cualquier situación.
La «e» de e-4ORCE hace referencia al sistema de tracción del motor eléctrico de Nissan. «4ORCE» (se pronuncia force) se refiere a la potencia física y a la energía del vehículo, mientras que el «4» representa el control de las cuatro ruedas. Según el fabricante, esta tecnología «genera un equilibrio sin precedentes entre potencia y control, ofreciendo así emoción pura al pisar el acelerador, pero sin renunciar al confort de todos los ocupantes del coche». El sistema gestiona la potencia de arrancada y de frenada para maximizar la suavidad y estabilidad de la conducción, además de ayudar al conductor a seguir fielmente la trazada perfecta sobre diferentes superficies, sin que el conductor tenga que cambiar su estilo de conducción. Nosotros tuvimos ocasión de ponerlo a prueba gracias a una unidad cedida por Antamotor, concesionario Nissan del Grupo Dimolk.
La ayuda de e-4ORCE al conductor se produce de cuatro maneras diferentes:
1. Sistema eléctrico: e-4ORCE es un sistema avanzado creado alrededor de motores eléctricos dobles. Hasta ahora, los vehículos eléctricos (VE) de Nissan habían montado siempre un único motor eléctrico, normalmente para tracción delantera. Nissan pretende diversificar su gama de VE, por lo que un sistema de tracción a las cuatro ruedas resulta un paso lógico, especialmente cuando el Nissan Ariya apunta al futuro de los crossovers eléctricos.
«La tecnología de control de la motorización eléctrica de Nissan e-4ORCE reacciona a las acciones del conductor mediante un control ultra-preciso que es tres veces más rápido que un parpadeo humano», explican desde Nissan. No solo proporciona una aceleración instantánea y suave, sino que también garantiza que la tecnología de control pueda gestionar una amplia gama de situaciones. Aunque también asume la excepcional capacidad de aceleración (5,7 segundos en el 0 a 100 km/h, o 5,1 segundos, dependiendo de la versión), brilla realmente cuando el conductor debe reaccionar repentinamente para evitar un obstáculo en la carretera, ya sea un animal u objeto. El sistema gestiona y se anticipa a las intenciones y expectativas del conductor de manera suave y eficiente.
2. Máxima agilidad: e-4ORCE ofrece un gran equilibrio entre control del chasis, la trayectoria trazada y la precisión de la dirección en todo momento, manteniendo el comportamiento del vehículo siempre predecible, incluso durante maniobras repentinas o evasivas. El sistema modula constantemente la potencia de cada motor, así como el control de los frenos de cada rueda, con el objetivo de generar un control fiable para el conductor.
Normalmente, cuando gira, un vehículo tiende a virar hacia fuera de la curva durante la aceleración, lo que obliga al conductor a mover más el volante o a reducir la velocidad (subviraje). La tecnología e-4ORCE distribuye el par a las ruedas delanteras y traseras del vehículo para maximizar el agarre de los neumáticos según las condiciones de la superficie de la carretera y la situación del vehículo. El reparto de la tracción total del sistema e-4ORCE tiene una distribución predeterminada de 50/50, pero también puede transferir hasta el 100 % de la potencia a las ruedas delanteras o traseras, o una combinación intermedia, en función de diversas condiciones de carretera y conducción. La fuerza de desaceleración se controla de manera óptima en cada una de las cuatro ruedas, a través de una combinación de frenada regenerativa y frenada hidráulica, lo cual mejora la capacidad de giro y la desaceleración.
El resultado es un mayor nivel de control, especialmente en las curvas, que ofrece al conductor una experiencia agradable y segura con un ajuste mínimo de la dirección.
3. Confort y seguridad para todo el mundo: Desde el principio, el equipo de ingeniería encargado del desarrollo del sistema e-4ORCE fijó el confort como su prioridad. El reto era garantizar unas elevadas prestaciones dinámicas y una facilidad de conducción para todos los conductores en diferentes situaciones y escenarios climatológicos.
La frenada regenerativa es una de las características principales de un VE. Esta tecnología permite recuperar la energía cuando el coche desacelera, y luego envía dicha electricidad de vuelta a la batería. Dado que el sistema e-4ORCE gestiona la frenada y la potencia de cada rueda, cuando se activa la frenada regenerativa en los motores eléctricos delanteros y traseros el sistema trabaja para reducir el cabeceo y la inclinación del vehículo. Esta función contribuye a mantener el habitáculo, y a los pasajeros que van en ella, más nivelados, lo que a su vez contribuye a prevenir el mareo, como puede suceder en situaciones de tráfico denso en las que hay que parar y reanudar la marcha muchas veces.
4. Mayor confianza en carretera: Conducir sobre superficies difíciles, como pueden ser carreteras mojadas, heladas o nevadas, puede resultar estresante incluso para el conductor más experimentado. El control preciso de la motorización eléctrica y del sistema de frenos que ofrece la tecnología e-4ORCE garantiza que la potencia se transmita a las ruedas con mayor agarre al mismo tiempo que estabiliza el movimiento del vehículo para mantener el control de la conducción y la fidelidad de la trayectoria. Si el conductor acelera demasiado, el sistema gestiona la potencia para garantizar que se mantiene el control y la trazada, incluso sobre superficies resbaladizas.
Para facilitar la gestión de la elevada potencia e instantánea entrega de par de los motores eléctricos, Nissan ha aprovechado toda su experiencia diseñando y construyendo algunos de los vehículos con transmisión 4x4 más prestigiosos del mundo, desde el todoterreno más puro como el Nissan Patrol al híperdeportivo GT-R. De esta forma ha logrado ofrecer un depurado sistema de gestión de par que permite pasar toda la potencia al suelo garantizando un control absoluto y una seguridad máxima en toda circunstancia. La experiencia adquirida en los últimos años desarrollando otros vehículos eléctricos como el Nissan Leaf, y compitiendo en el mundial FIA de Formula-E, ha contribuido también a que el Ariya derroche tecnología por los cuatro costados.