Alfonso Rueda se sienta a la batería en Pontevedra para simbolizar su apoyo a una cultura gallega accesible a todos
PONTEVEDRA
El candidato del PP propone una red de dinamización para el rural y muestra su compromiso con la Lei de cultura inclusiva e accesible
26 ene 2024 . Actualizado a las 11:02 h.Sentado a la batería y con el conselleiro Román Rodríguez a la guitarra, Alfonso Rueda quiso simbolizar este jueves en Pontevedra su apoyo al sector cultural gallego. Ante un numeroso público que dejó pequeño el vestíbulo de la sede social de Afundación, el candidato del PP a la presidencia de la Xunta avanzó dos de sus compromisos de cara a las elecciones autonómicas del próximo 18 de febrero: el impulso definitivo a la Lei de cultura inclusiva e accesible y la puesta en marcha de una red de dinamización cultural en el rural.
De este modo, Rueda, tras aludir a los tiempos complicados que se vivieron en el 2020 y 2021 como consecuencia de la pandemia del coronavirus y confirmar que el programa completo del PP —«ambicioso, realizable»— se conocerá este sábado en Lugo, se mostró convencido de que la Lei de cultura inclusiva sería ya una realidad si no fuera por la convocatoria electoral. El objetivo de esta normativa es que «a cultura en Galicia sexa accesible a todo o mundo con independencia da súa condición persoal, da súa condición económica (...) ou tamén da súa condición xeográfica», remarcó subrayando que todos los gallegos deben acceder a los servicios públicos fundamentales «e a cultura é un servizo público fundamental».
Íntimamente relacionado con esta ley es la apuesta adelantada por Alfonso Rueda de poner en marcha una red pionera de dinamización de la cultura gallega en el rural. De este modo, se busca que las representaciones artísticas no sean algo exclusivo de las ciudades o de las villas más grandes y que el rural disfrute de una «programación axeitada» sin que se produzca ningún tipo de detrimento en la ofertan que ya tienen las urbes.
El candidato popular a la Xunta se mostró convencido de que «a cultura vai saír fortalecida neste intercambio, enriquecida, se chega a todas partes con máis intensidade que nunca». En este punto, no obvió que para alcanzar esta meta será preciso realizar un esfuerzo económico, «sobre todo ao principio», importante.
La idea es conformar esta red como una asociación voluntaria que congregue a entidades públicas y privadas que trabajen en el rural y, así, poder coordinar toda la acción cultural y garantizar que tenga impacto en todo el territorio. Esto se traduciría en que «imos ter programacións máis regulares», señaló matizando que también habrá que realizar una oferta «máis específica» al lugar donde se vaya a realizar. Asimismo, aludió a la necesidad de impulsar el turismo cultural.
Rueda abogó en Pontevedra por una cultura gallega en positivo, «sen limitacións, sen definicións encorsetadas e sen carnés. Unha cultura de todos e para todos, puxante en todas as disciplinas e presente en todo o territorio».
Desmontando tópicos
Tanto Rueda como Román Rodríguez desmontaron el tópico que asocia al mundo de la cultura con una determinada corriente ideológica: «A cultura non é de ninguén», manifestó el candidato a la Xunta, mientras que el conselleiro de Cultura destacó que «é un mundo tremendamente diverso, tremendamente plural (...). Creo que a cultura é absolutamente libre, sen dogmas».
Román Rodríguez reconoció que esta pasada legislatura fue «complexa» dado que los primeros años estuvo marcada, en el ámbito cultural, por las acciones encaminadas a minimizar el impacto del coronavirus. En la actualidad, «está nunha boa situación», reseñó destacando que Galicia «é unha referencia artística», pero también organizativa.
En el transcurso de este encuentro con el sector cultural gallego se desarrolló una mesa redonda moderada por Anxo Lorenzo y en la que participaron Patricia Hermida, presidenta de la Asociación Galega de Empresas de Música; Mamen Quintas, de Ficción Producciones; e Iván Estévez, presidente de la Federación Galega de Bandas.