El fuego ha consumido el 70 % de la estructura de madera del complejo religioso de San Amaro en el que residen varios monjes desde hace una década
27 feb 2024 . Actualizado a las 19:14 h.Un incendio, del que se desconoce, por ahora, el origen ha destruido buena parte del monasterio budista Chu Sup Tsang, ubicado en la aldea de Ventoselo, en el municipio ourensano de San Amaro. El fuego se declaró sobre las 15.45 horas de este martes. Ese fue el momento en el que se recibió la primera alerta en el cuartel de la Guardia Civil de O Carballiño, desde donde dieron el aviso al 112. La Axencia Galega de Emerxencias movilizó de inmediato tanto a Protección Civil como a los agentes del parque de bomberos de O Carballiño, que aún trabajan en la zona intentando controlar el fuego. A esta hora se calcula que las llamas han devorado el 70 % de la estructura de este complejo que fue construido en madera. Además del templo, el conjunto religioso cuenta con una zona residencial en la que viven los monjes que, según los datos disponibles, están a salvo. Al parecer, todos ellos estaban fuera del recinto cuando se inició el incendio.
Según los testigos, el fuego se declaró en la primera planta del edificio principal, el dormitorio, en concreto cerca de la moldura que cubre el lugar por el que pasa el tubo de la chimenea que tienen en la planta inferior. Aunque en cuanto vieron las llamas varios miembros de la comunidad intentaron sofocarlas con extintores, la cantidad de madera del edificio hizo que el incendio se propagase con rapidez. De nada sirvieron sus esfuerzos por frenarlo.
El monasterio budista Chu Sup Tsang se inauguró en agosto del 2014, bajo la batuta del maestro lama tibetano Gueshe Tenzing Tamding, aunque para entonces ya llevaba funcionando algún tiempo. Desde el primer momento la integración con los vecinos de la aldea fue perfecta y en esta década han sido muchos los ourensanos que lo han visitado coincidiendo con jornadas rituales especiales como cuando se realiza el ceremonial de la puya de fuego, un ritual que según la enseñanza budista se utiliza para eliminar los obstáculos hacia la meta espiritual. Entre las monjas que residen en San Amaro hay algunas llegadas de fuera de Galicia y otras que son originarias de la comunidad autónoma.