El fin de las tiendas de toda la vida: «No es un negocio viable»

Cándida Andaluz Corujo
cándida andaluz OURENSE / LA VOZ

LOBIOS

José Miguel Ruiz Hermida, de Comercial Miguel de Lobios
José Miguel Ruiz Hermida, de Comercial Miguel de Lobios Cándida Andaluz

Comercial Miguel de Lobios cerró este miércoles sus puertas, tras 80 años sirviendo desde prensa a medias o zapatos

21 dic 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

En marzo del 2022, José Miguel Ruiz Hermida anunció a sus vecinos de Lobios que cerraría las puertas de su negocio. Decidió, un tiempo más tarde, prorrogar dos años más la actividad de Comercial Miguel y este miércoles cerró las puertas de forma definitiva, con 67 años, dejando al municipio sin su tienda de toda la vida. Su última venta fueron unas medias y unos leotardos de oferta. A un euro cada uno.

José Miguel Ruiz Hermida tomó las riendas del negocio hace 42 años, cuando decidió hacerse con el traspaso de una tienda que abrió sus puertas en 1932 de la mano de los abuelos de su mujer. Recuerda con nitidez el día: 2 de enero de 1982. Entonces era Comercial Movilla. Fue un negocio próspero durante décadas, pero el despoblamiento del rural e internet fueron poco a poco mermando las ventas.

Afirma que los mejores años fueron entre 1990 y el 2005. Entonces había muchos niños en el colegio del municipio y también en el vecino de Entrimo, por lo que se despachaba mucho material escolar. Pero no solo eso, los vecinos acudían al establecimiento a comprar ropa, calzado, perfumes, productos de mercería como gomas, hilos y agujas, sábanas, prensa, revistas, juguetes... Era el Corte Inglés de A Baixa Limia.

«Hoy en día no es un negocio viable. La mayor parte de la gente mayor está en la residencia y los jóvenes o no están o prefieren comprar en grandes superficies o por internet. Es verdad que da pena dejarlo, después de tantos años y al tratarse de un negocio familiar, pero no se puede mantener. Una señora me dijo apenada que a ver en donde iba a compra ahora las gomas para las bragas. Ya le dije que de eso solo no podía vivir», relata.

Aunque durante estos casi dos años sus productos han estado en liquidación aún le queda mercancía en la que se han interesado varios feriantes.

Ahora toca descansar. Comercial Miguel abrió durante los últimos 42 años todos los días —los domingos y festivos solo por la mañana—, por lo que Miguel afirma que le toca dedicarse todo el tiempo. Con los ahorros de toda una vida se ha comprado una autocaravana. Viajar y levantase a la hora que quieran son algunos de sus planes. Es parte de la última generación de tenderos locales.