La localidad mantiene alguna de las tradiciones más ancestrales de la Semana Santa
15 mar 2024 . Actualizado a las 05:00 h.En Oímbra han comenzado los preparativos y ensayos para la celebración de la Semana Santa. Es uno de los municipios de la provincia donde se conservan alguna de las costumbres más singulares dentro de la Diócesis de Ourense, como la procesión de los penitentes del Jueves Santo (21.00 horas). En esa jornada, y tras el Oficio de Tinieblas, los ofrecidos recorren el templo de rodillas y tapados con mantos para no ser reconocidos, con una corona de laurel en la cabeza. La iglesia se mantiene en semipenumbra, tan solo iluminada por velas, para garantizar también ese anonimato. La alcaldesa del municipio, Ana Villarino, que este jueves presentaba el programa junto al nuevo párroco, Freddy José Marcano, y el obispo de Ourense, Leonado Lemos, aprovechó la ocasión para agradecer la implicación de los vecinos en la recuperación de la celebración de la Semana Santa, que se había perdido prácticamente en el municipio. De hecho, recordó que ese revivir de las celebraciones se produjo tras tres décadas sin los actos más emblemáticos. «Foi hai unha década que comezou esa recuperación gracias á chegada a Oímbra de don Raúl Afonso como párroco, que se empeñou en que a recuperásemos», señaló la regidora que aprovechó para agradecer también ese esfuerzo del sacerdote ourensano. Hoy, señaló, la cita ha unido a los vecinos ya que, según contó «hai xente que non é de ir a misa ós domingos, pero que está nestas celebracións, axudando e implicándose». Recordó que las representaciones que se llevan a cabo requieren de figurantes (no lo son los penitentes) y también de portadores de las imágenes. Precisamente la imaginería religiosa de la parroquia es otra de sus singularidades. Disponen de figuras articuladas que se calcula que pertenecen al siglo XVII. Ellas protagonizan varias ceremonias y procesiones, como la del Encuentro (el Viernes Santo a mediodía) en la plaza del pueblo, o el desenclavo y procesión del Santo Entierro ese mismo día, a las 20.00 horas. El sábado a las 12.00 celebran también la procesión de la Soledad uniendo las dos iglesias, la vieja y la nueva.