Cabezas se encomienda a los militantes del PP de Ourense: «Lo sabemos hacer, lo hicimos y podemos volver a hacerlo»

Ruth Nóvoa de Manuel
Ruth Nóvoa OURENSE

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Manuel Cabezas, entre José Manuel Baltar y Paula Prado, en el momento de ser aclamado presidente del PP de la ciudad de Ourense
Manuel Cabezas, entre José Manuel Baltar y Paula Prado, en el momento de ser aclamado presidente del PP de la ciudad de Ourense R. Nóvoa

El que fuera alcalde durante doce años fue elegido presidente de la junta local del partido y se puso como reto devolver a la ciudad «el respeto, el equilibrio, la sensatez y la gestión»

23 jul 2022 . Actualizado a las 23:03 h.

A Manuel Cabezas, que fue regidor de Ourense entre 1995 y el 2007, lo eligieron este sábado como presidente de la junta local del PP (con el apoyo del 95,8 % de los compromisarios), pero le aplaudieron como próximo candidato a la alcaldía de la ciudad. Y aunque el veterano político, rescatado ahora por los populares, insistió en que los tiempos para designar aspirantes los marca el partido, lo cierto es que sus intervenciones eran las de alguien que tiene el objetivo de recuperar la alcaldía que ya ocupó durante doce años. Para ello se encomendó a los militantes: «He decidido dar un paso al frente. Me ha animado muchísima gente. He sido siempre una persona más de gestión que de organización interna. Nunca he estado en los órganos de partido de una manera activa. Por eso necesito toda la ayuda del mundo. Hace falta que cada uno aporte lo que pueda».

Aunque la oposición ha censurado la vuelta al pasado que supone la elección de Cabezas para liderar el proyecto del PP, él no está dispuesto a renunciar a su legado y, durante el congreso en el que se eligió a la nueva junta local, lo colocó como piedra angular de la reconstrucción del partido en la ciudad. De hecho, anunció la puesta en marcha de un comité asesor nutrido de nombres de personas que lo acompañaron en sus gobiernos y que como él, hasta hoy, conjugaban la política en pretérito perfecto. Lo que parece tener claro es que la tarea no será sencilla. Él mismo echó las cuentas. «Tenemos un resultado electoral que no reproduce el de aquella época y queda un camino complicado. Ahora tenemos el apoyo del 22 % y nosotros gobernábamos con el del 47 %. Para una mayoría absoluta necesitamos que nos vote uno de cada dos ourensanos».

Cabezas no eludió la incómoda situación que atraviesan los populares como socios en el Concello de Gonzalo Pérez Jácome. «Las circunstancias han sido otras porque el partido pasó a ser oposición. Luego tuvo una época de gobierno en minoría difícil y ahora está en una coalición también complicada, porque es un partido de gobierno al que le gusta definir proyectos y hoy trabaja condicionado». Dirigiéndose a los siete concejales del PP, les dio las gracias. «Quiero reconocer su trabajo en unas condiciones que no son fáciles, en las que no pueden desarrollar sus proyectos. La bondad del grupo municipal ha sido votar a favor de cosas que han servido para poner a disposición de los ciudadanos recursos que estaban parados».

Preguntado sobre si cogobernar con Jácome les pasará rédito o factura, siguió la línea argumental del grupo en los últimos tres años. «Espero que la gente lo entienda y lo sepa. Yo lo valoro positivamente, es lo que hay que hacer. No se trata de vender proyectos. Los proyectos no son de una persona, son de la ciudad. El PP es un partido de gobierno, pero creo que no le han dejado serlo». Y concretó: «Las personas que han estado en el grupo municipal durante estos tres años y medio han hecho un esfuerzo personal y han antepuesto los intereses de la ciudad a los intereses partidistas. Han ayudado a desbloquear recursos económicos para que la ciudad pudiese disponer de ellos para seguir adelante. Espero que se vea esa parte: que ha primado sobre una voluntad política el querer hacer y el querer trabajar por los ourensanos».

Cabezas, durante su intervención ante los militantes
Cabezas, durante su intervención ante los militantes Alejandro Camba

Sobre la etapa que ahora se inicia fue claro: «Me encuentro con ganas». Confesó Cabezas que se siente sobrevalorado porque todo lo logrado durante los tres mandatos en los que obtuvo mayoría absoluta se consiguió «en plural». Y en ese contexto, apeló a los funcionarios de Ourense, a los que Jácome señala recurrentemente: «Fueron los trabajadores municipales durante doce años los que nos ayudaron a sacar los proyectos, no tuvimos que buscar ayuda externa».

A la hora de justificar su regreso, con 69 años, apeló a la necesidad de devolverle a la política y a la ciudad «el respeto, el equilibrio, la sensatez y la gestión». «Jamás pensé en volver, no lo he buscado. Si lo hago es porque nunca me ha gustado ponerme de perfil con los retos. Ha llegado el momento de cambiar las cosas y de recuperar el tiempo perdido. Hay alternativa. Tenemos futuro. Lo sabemos hacer, lo podemos hacer, lo hicimos y podemos volver a hacerlo».

Preguntado por qué es lo que más le preocupa de la situación de la ciudad, se refirió a las faltas de respeto y los insultos que se han convertido en rutina en el discurso político. «El terreno está enfangado y esta fórmula solo nos lleva al desastre. No voy a contribuir a ello. Hay que dedicar las energías a trabajar. La injuria, la calumnia, el insulto no tienen cabida en mi forma de ser y en eso no voy a entrar. Con la convivencia y la ilusión la gente se anima».

«He visto como espectador el deterioro de algunas de las cosas que tanto nos costó poner en marcha», indicó el nuevo presidente del PP local antes de hacer un repaso por las riberas del río, los puentes, la humanización de las calles, el casco histórico, el festival de cine, los aparcamientos subterráneos, el termalismo, el sellado del vertedero, las zonas verdes o el abastecimiento y el saneamiento. Todo ello, apuntó, siempre con un presupuesto aprobado en tiempo y forma. «No teníamos recursos pero los conseguimos», zanjó.

En un momento en el que se hacen cábalas sobre cuánto tiempo le queda a la alianza de Democracia Ourensana y Partido Popular, Cabezas apeló al diálogo con el grupo municipal antes de dar respuesta a la pregunta del día: ¿Cuándo se rompe con Jácome»?

«No soy persona de imposiciones. Quiero reunirme con el grupo y reflexionar. Si digo que el Partido Popular es un partido de gobierno y no puede desarrollar sus ideas al cien por cien, si considera que no existe un proyecto, hay que reflexionar sobre eso y hay que tomar decisiones. Pero aquí no se va contra nadie, aquí se busca lo mejor para la ciudad. La decisión, si es, será colegiada y producto de un proceso reflexivo».

En la clausura de congreso local Manuel Cabezas estuvo acompañado por el presidente del PP a nivel provincial y máximo responsable de la Diputación, José Manuel Baltar, con quien no tuvo, durante su etapa política, una relación estrecha. Pero los nuevos objetivos han diluido las distancias y Baltar le encomendó, ni más ni menos, que la «reconquista de Ourense». «Cabezas é a renovación coa experiencia acreditada da magnífica xestión que lle deu a cidade», afirmó el presidente de los populares en la provincia. Y añadió: «As cidades necesitan gobernos e os gobernos saen dos partidos. O noso partido ten ó mellor alcalde de Ourense. En política sumar é multiplicar. Moitos buscaban que volvese e moitos lle pedimos que volvese». Baltar, al repasar los logros electorales del PP, no perdió la ocasión de pasar recado a la Xunta, citándola expresamente: «Tamén desde Ourense contribuimos ás maiorías».

En su habitual recurso a las cifras habló de los concellos en los que gobierna su formación: «Son 61 pero temos obxectivos estratosféricos. Queremos superar o récord dos 71 pero a secretaria do PPdeG pediunos máis». La aludida, Paula Prado, también participó en la clausura en una jornada de la que se ausentó Alfonso Rueda, que viajó a Andalucía a la toma de posesión de Juanma Moreno. «Non hai mellor persoa que Manuel Cabezas para recuperar o orgullo de ser ourensán»,aseguró Prado.

A la cita orgánica no acudió el último presidente del partido a nivel local, Jesús Vázquez. «Hablé con él —aseguró Cabezas— pero estaba de viaje». Y no desaprovechó la oportunidad de tender un puente: «Quiero decir que respeto mucho la dificultad con la que gobernó en minoría». Pero en un día como ayer, el nuevo presidente del PP local se acordó también de otro exalcalde, este del PSOE. Quiso reconocer públicamente a Francisco Rodríguez y recordar cómo la operación Pokémon dinamitó el bipartito que lideró justo después de sus tres mandatos.

Al término del congreso, después de la oda al pasado, Cabezas fue interrogado por el futuro y por si, llegado el momento, volvería a recurrir a Jácome para gobernar. «Contemplo solo dos escenarios. Uno es por el que vamos a pelear: tener una mayoría absoluta. El otro, ser el partido más votado, que es el que creo que debería gobernar (y esto lo pienso siendo el PP o el PSOE). No me muevo en más escenarios que esos».