Función notarial: ecosistema de la seguridad jurídica preventiva
OPINIÓN
Todos, tanto las personas individuales como las empresas, necesitamos seguridad y certeza para ejecutar y desarrollar nuestros proyectos sociales, vitales y económicos. Para dar cumplimiento a estas y otras necesidades e intereses nació el notariado como creación propia de la sociedad que aporta seguridad jurídica. Como depositario de la fe pública y dentro del contexto constitucional, el notariado se configura como una institución que garantiza el principio de seguridad jurídica en su vertiente preventiva o cautelar mediante una aplicación pacífica y normal del derecho. La intervención notarial reporta un índice de litigiosidad bajísimo, fomenta la mediación y previene y evita de modo general pleitos y conflictos, lo que contribuye a la libertad y la paz social.
La actuación notarial tiene siempre presente la búsqueda de la verdad negocial y efectúa una labor de corrección de las asimetrías, equilibrando la información y asesoramiento de las personas y apoyando a la parte más débil o en situación de vulnerabilidad. A ese cometido dedican su esfuerzo diario los 166 notarios y notarias que ejercen su profesión en Galicia, y que forman parte de un colectivo de casi 3.000 profesionales distribuidos por todas las ciudades y por un buen número de pueblos de España.
Pero la función notarial no se circunscribe al ámbito de las relaciones jurídico-privadas, sino que trasciende a una estrecha y prolija cooperación con las diferentes administraciones. A través del centro tecnológico del notariado (Ancert), se comunica información al catastro, registros mercantiles y de la propiedad, ayuntamientos, Agencia Tributaria, juzgados y otros organismos.
Es de subrayar la intensa colaboración en la lucha contra la criminalidad financiera que propicia el Órgano Centralizado de Prevención del Blanqueo de Capitales (OCP), creado por el Consejo General del Notariado en 2005, y cuya alta eficacia ha recibido el reconocimiento del Consejo de la Unión Europea.
El OCP ha detectado más de 9.000 operaciones sospechosas y ha remitido a las autoridades policiales, judiciales y fiscales información sobre más de 300.000 personas. Además, ha fortalecido la colaboración con la Comisión de Prevención del Blanqueo de Capitales e Infracciones Monetarias.
En el ámbito social, cultural y solidario sobresale la labor desempeñada por nuestra Fundación Aequitas en el campo de la discapacidad o la protección de menores. A este respecto, cabe destacar el esfuerzo de debate, actualización jurídica y difusión social emprendido desde la aprobación de la Ley 8/2021 que reformó la legislación civil y procesal para el apoyo a las personas con discapacidad en el ejercicio de su capacidad jurídica. Por lo que respecta al Colegio Notarial de Galicia, desde el 2021 ha organizado reuniones con miembros de colectivos de personas con diversidad funcional para explicar el contenido de dicha normativa y, en el aspecto jurídico, ha participado en jornadas como la que esta misma semana se celebra en la Facultad de Derecho de A Coruña para analizar la situación actual en la aplicación de la citada ley.
La Fundación Notariado, además de su acción cultural y social, presta apoyo al alumnado que se forma para acceder a la profesión, en estrecha colaboración con las academias de preparación de oposiciones a notarías de cada Colegio Notarial.