Empujar a Sánchez a convocar elecciones

María Pereira López
maría pereira lópez MIEMBRO DEL EQUIPO DE INVESTIGACIONES POLÍTICAS DE LA USC

OPINIÓN

Pedro Sánchez antes de la sesión de control al Gobierno.
Pedro Sánchez antes de la sesión de control al Gobierno. Mariscal | EFE

03 mar 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Si todo indicaba que la amnistía se convertiría en el tema principal de la política española durante el 2024, la aparición en escena de Koldo García ha echado por tierra todas las previsiones. De repente, la amnistía ha quedado relegada política y mediáticamente porque el interés de todos se ha centrado en un caso de corrupción que toca puntos neurálgicos del PSOE, y que se extiende por diversas comunidades.

Hacía tiempo que el PSOE no sangraba de una forma tan rotunda, con un aprovechamiento de beneficios tan extenso, tan miserable, en un tiempo donde todas esperábamos la solidaridad y algunos se lucraron de forma repugnante.

El caso Koldo es uno de esos casos que asquea a los ciudadanos, que les hace detestar la política, que nos lleva a creer que todos y todas las que se dedican al servicio público lo hacen a la espera de dar un pelotazo que les solucione la vida.

El caso Koldo es un bálsamo para el PP, una suerte de ungüento que cicatriza heridas del pasado, porque frente a los ERE andaluces aquí si hay un lucro indecente por parte de algunos; y todo apunta a que esto no puede ser solo obra del portero de un prostíbulo, capaz de orientar decisiones de cargos y gobiernos varios.

Koldo es la punta del iceberg, y el PP lo sabe, y por eso aspiran a encontrar en la investigación el material suficiente para que las conexiones queden claras y el gobierno se quiebre. Al PP no le importa Koldo, incluso no le importa Ábalos, a él le piden que tire de la manta, porque lo que realmente le importa al PP es el gobierno; y el caso Koldo puede ser una autopista para llegar al gobierno.

La oposición política, la mediática y la judicial han comenzado a trabajar para derribar al gobierno de Sánchez, y el caso Koldo es hoy su camino preferente, la verdadera opción para que el gobierno actual no finalice la legislatura.

Fue un caso de corrupción el que propició la única moción de censura exitosa de nuestra democracia, que se repita es difícil, pero no lo es que el desgaste lleve el malestar al interior del PSOE, porque no hay que agitar mucho el avispero para que los socialistas se revuelvan, y las viejas glorias recobren el relato principista.

Si algo nos ha enseñado Sánchez es que él no se va, y si se va, vuelve, y que sabe distinguir entre los que están con él y los que están en el otro lado, y hace mucho tiempo que ha puesto a Ábalos en el otro lado. Hace tiempo que Sánchez sabe que en esta legislatura van a por él, la única duda es quién. En su partido, en el Parlamento, en los medios, la justicia; dónde está la palanca, dónde dan los números, los datos, los relatos, para sacar a Sánchez; esa es la pregunta, porque de nada vale empujar si no sabes por dónde.