Uno de los coches más esperados de este año ya ha desvelado sus secretos: el R5 intenta seguir la senda del éxito de su antecesor, que entre 1972 y 1996 vendió 9 millones de unidades. Ahora apuesta por el diseño y los motores eléctricos para conquistar la ciudad.
19 mar 2024 . Actualizado a las 21:39 h.Simpático y amable, esa es la impresión que quiere dar este nuevo producto de Renault, que pretende convertirse en icónico pensando en los jóvenes urbanitas europeos.
La verdad es que se trata de un vehículo que despierta emociones con solo verlo, además de recordar al exitoso R5 original que ya conquistó a las generaciones setenteras.
El nuevo R5 mide 3,92 metros, es por tanto un coche de tamaño ciudadano, con 13 centímetros menos que un Clio. Se fabrica en la planta francesa de Douai sobre la plataforma AmpR Small que llevarán todos los eléctricos pequeños del grupo. El modelo se podrá elegir con dos opciones de batería de ion litio. La de mayor capacidad es de 52 kWh con una autonomía de hasta 400 kilómetros. La pequeña será de 40 kWh y su autonomía estará limitada a 300 kilómetros. Estas baterías se combinan con un motor de rotor bobinado síncrono que se ofrece en tres potencias: 70, 90 y 110 kW, que equivalen, respectivamente, a 95, 120 y 150 caballos. El cargador de baterías es bidireccional con lo que se pueden cargar otras baterías o alimentar sistemas eléctricos desde la propia batería del coche.
El interior del nuevo R5 es igual de divertido que su imagen externa, con unos asientos envolventes que recuerdan a los del R5 Turbo de los ochenta. Tiene un salpicadero acolchado, también de aire retro, pero con una doble pantalla de diez pulgadas cada una en las versiones altas, para el cuadro de instrumentos y la navegación, música y teléfono. Además de una gama de colores modernos, el R5 ofrece personalización interior.
Baterías más compactas y ligeras
Las baterías del nuevo R5 están compuestas de solo cuatro grandes módulos, frente a los doce de otros modelos de la marca. Eso permite ahorrar espacio y peso, en este caso 20 kilos menos que las del Renault Zoe eléctrico de parecido tamaño.
Las baterías se refrigeran con líquido y además se monta un nuevo cargador bidireccional de corriente alterna de 11 kW que permite que las baterías del coche puedan alimentar elementos externos como cargadores de bicis o patinetes eléctricos, o la conexión de pequeños electrodomésticos como cafeteras, aspiradoras o hasta barbacoas eléctricas. Con cargador de corriente alterna de 11 kW, la batería del R5 se puede cargar en solo 4 horas y media. Con una potencia de 100 kW se reduce a solo 30 minutos.