Con casi 60 kilómetros de autonomía eléctrica y 204 CV, este Cupra Formentor se inscribe en el segmento de los SUV deportivos. Consume poco y rueda muy suave, pero si le pisamos tiene un comportamiento noble y estable y un sonido adictivo en el modo Sport.
17 mar 2024 . Actualizado a las 05:00 h.El Cupra Formentor lleva ya dos años en el mercado y cuenta con una amplia gama de motorizaciones, gasolina, diésel y PHEV (híbrido enchufable). Aunque teóricamente es un SUV, tanto su diseño como su comportamiento dinámico le confieren un punto deportivo. Exteriormente tiene una imagen más afilada que otros modelos de su segmento, porque mide 4,45 metros de largo pero es más bajo, 1,51 metros (el Nissan Qashqai, por ejemplo tiene 11 centímetros más de altura). Curiosamente, esto no se traduce en una menor altura interior, porque lo cierto es que hay una generosa distancia desde la cabeza del conductor hasta el techo. En la carrocería destacan los pliegues en los laterales y el capó —la visión de estos últimos cuando estamos al volante es muy atractiva—, unos faldones delantero y traseros muy trabajados y las falsas salidas de escape dobles, aunque sea un trampantojo porque no tienen ninguna utilidad más allá de la estética. También llama la atención la firma luminosa, con una tira led recorriendo todo el portón de piloto a piloto.
Del interior cabe destacar la comodidad de los asientos, que a pesar de no ser baquets recogen perfectamente el cuerpo pero a la vez son amplios (no agobian), y la gran visibilidad tanto por el parabrisas como por la luneta y los retrovisores. Los materiales y molduras son correctos, únicamente podría haberse empleado una superficie acolchada en la consola central, en vez del plástico duro sobre el que apoyamos la rodilla derecha. El cuadro de instrumentos totalmente digital puede mostrar seis estilos distintos y el centro del salpicadero lo preside una gran pantalla multifunción de 12 pulgadas. No hay botones físicos de acceso directo, por lo que activar funciones como poner los modos de conducción o forzar al motor para circular sin emisiones obliga a navegar por varios menús. Un detalle elegante es la fina línea led que recorre toda la base del parabrisas y que continúa por las puertas, y que sirve para alertarnos de coches en ángulo muerto, entre otras cosas.
DOS POTENCIAS
El Cupra Formentor 1.4 e-Hybrid está disponible en versiones de 204 y 245 caballos, respectivamente. Ambas cuentan con idéntica motorización —un gasolina de 1.395 cc y 150 CV, turboalimentado, y un motor eléctrico de 85 kW, los dos tirando del eje delantero—, pero el modelo VZ 1.4 e-Hybrid rinde 41 CV más gracias a una gestión electrónica diferente. También cuenta con una suspensión adaptativa, mientras que en la versión de 204 CV los amortiguadores no tienen posibilidad de ajuste. La diferencia de aceleración no llega al segundo (7,0 en el 0 a 100 km/h frente a 7,8) y tampoco es mucha en cuanto al consumo (0,3 litros más a los 100 km el VZ 1.4 e-Hybrid). Montan la misma caja de cambios automática DSG de 6 velocidades, que es un prodigio de suavidad es inapreciable en el tránsito de una marcha a otra.
La batería de 12,8 kWh permite circular 59 kilómetros en modo cien por cien eléctrico, disponiendo de un sistema por el que, cuando circulamos en modo híbrido, podemos reservar un porcentaje de batería o ir cargándola sobre la marcha (aumenta el consumo del motor de combustión). La frenada regenerativa se puede regular en tres opciones (alta, baja o automática, en la que el sistema actúa dependiendo del tráfico o del trazado de la vía: por ejemplo, frena si nos acercamos a una rotonda o si detecta una señal que obliga a reducir la velocidad). La carga vía enchufe se puede hacer a un máximo de 3,7 kW en corriente alterna, con lo cual recuperamos la máxima autonomía en menos de cuatro horas.
Dinámicamente es un coche que se agarra muy bien a la carretera, noble y estable en las curvas, con una suspensión firme pero no dura, y que permite hacer una conducción ágil con seguridad y muy divertida. Si pisamos a fondo en modo Sport da la impresión de que el Formentor se lo piensa un instante —«de verdad quieres que ponga toda la carne en el asador», parece decir— y luego se lanza de forma decidida y progresiva, acompañado con un sonido del motor más grave y muy adictivo. La dirección se endurece y facilita el control del vehículo.
El equipamiento incluye llantas de 18 pulgadas, volante calefactable, control de crucero adaptativo con mantenimiento de carril y un panel digital mediante el cual los pasajeros de atrás pueden regular la temperatura del climatizador. Hay cuatro tomas USB-C, bandeja de carga inalámbrica y conexión con Android Auto y Apple Car Play. El maletero tiene 345 litros, cien menos que las versiones no híbridas porque parte de la batería va situada debajo.
El Cupra Formentor híbrido enchufable cuesta 41.000 euros en el caso del modelo de 204 CV y 48.500 en el de 245 CV, en ambos casos antes de aplicar las ayudas del Plan Moves.