A sus 80 años, el icónico diseñador transalpino, creador de coches como el Panda o el Volkswagen Golf, sigue al pie del cañón al frente de la compañía que fundó en el 2016
19 ago 2018 . Actualizado a las 05:00 h.¿Sabía que el famoso coche DeLorean de la película Regreso al futuro fue diseñado por un italiano? Por el mismo que también ha creado automóviles tan populares como el Fiat Panda o el Volkswagen Golf. Es Giorgetto Giugiaro, el más emblemático diseñador de coches de la historia, aunque su leyenda va más allá de la automoción, quien acaba de cumplir 80 años en plena forma. Para celebrarlo, el diseñador del siglo, como fue designado en 1999 en Las Vegas, ha querido regalar una obra suya a su pueblo natal: Garessio (Piamonte). Se trata de un gigantesco cuadro de cinco por cuatro metros que será colocado en la iglesia y que recoge una escena de la representación teatral del Martirio de Cristo que cada año se celebra en la localidad. Junto al cuadro, sus vecinos pueden además admirar la última de las creaciones de Giugiaro, el GFG Sibylla, una berlina eléctrica que abre las puertas al coche del futuro.
Nacido el 7 de agosto de 1938, Giugiaro forma parte de la historia de la automoción por derecho propio. Con solo 17 años fue contratado en el departamento de diseño de Fiat. Su talento habría quedado oculto en 1959 si no se hubiera presentado a Nuccio Bertone, titular de una empresa de carrocerías, que vio en el joven Giorgetto el futuro. Tras cinco años pasó a Ghía, para en 1968 empezar su aventura en solitario junto con su gran amigo, el ingeniero Aldo Mantovani, creando Italdesing Giugiaro.
«Yo me siento el primer comprador del coche que me dispongo a diseñar», explica el genio, de cuya cabeza han salido algunos de los vehículos más populares del siglo XX. Italdesing Giugiaro está detrás de una larga serie de turismos, ya que ha trabajado para Alfa Romeo, Audi (100), BMW, Daewoo (Matiz), Daihatsu, De Lorean, Iveco, Isuzu, Lancia (Thema), Lotus, Maserati, Mini, Renault (19 y 11), SsangYong, Seat (Ibiza)... Pero hay dos constructores a los que el nombre de Giugiaro está estrechamente ligado: Fiat y Volkswagen.
Con los alemanes la colaboración empezó en 1974 con el diseño del Passat, pero el éxito total llegó con un automóvil que ha hecho historia: el Volkswagen Golf. La responsabilidad era grandísima, ya que se trataba de sustituir el popular Escarabajo y hacer un producto de bajo costo. La línea de dos volúmenes fue apreciada por el público y la primera serie del Golf se mantendría en el mercado durante nueve años, llegando a vender seis millones de vehículos.
El éxito del Golf hace que en 1980 Fiat llame a su puerta para encargarle el Panda, heredero del 500. La colaboración continuó con el Uno y el Punto, tres utilitarios cuya producción ha durado años y de los que se han vendido millones de vehículos. De Italdesing Giugiaro han salido también joyas de diseño futurista como el Lotus Sprit, el BMW M1 o el Alfa Romeo Brera, así como maravillosos prototipos como el Maserati Boomerang, el Renault Gabbiano, el Bugatti EB112 o el Ferrari GG50.
La creatividad de Giugiaro va más allá del automóvil. El Juventus Stadium lleva su firma, como también los trenes de alta velocidad de la compañía privada Italo y, sobre todo, las cámaras de foto Nikon, con quien la colaboración ha sido larga y fructífera. Pero Giugiaro también ha sido capaz de crear una pasta, las Marille para Voiello, un macarrón concebido como un producto industrial, y una botella para el Aceto Balsámico de Módena para conmemorar en el 2016 el 125 cumpleaños del consorcio de este preciado vinagre.
Nueva etapa
Aunque en el 2010 Giugiaro y su hijo Fabrizio vendieron las acciones de Italdesing, que ahora pertenece a Volkswagen, el diseñador no piensa aún en la jubilación. En el 2016 fundó una nueva empresa, GFG Style, de la que es presidente y su hijo administrador delegado y de la que ya han salido maravillas como el coche eléctrico GFG Sibylla en colaboración con la empresa china Techrules. Es la nueva vida de un genio que regresa al futuro.
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