La pieza original de la Operación Carioca se juzgará durante el mes de junio y durará ocho sesiones

André Siso Zapata
André S. Zapata LUGO / LA VOZ

LUGO

Registro en el local de alterne Queens, de Lugo, epicentro de la Operación Carioca. Año 2011
Registro en el local de alterne Queens, de Lugo, epicentro de la Operación Carioca. Año 2011 OSCAR CELA

Se piden penas de prisión para cinco acusados, tres proxenetas y dos agentes de la ley que los habrían protegido. Armando Lorenzo, cabo de la Guardia Civil, se enfrentará a 21 años de cárcel

13 mar 2024 . Actualizado a las 11:25 h.

La Operación Carioca, la macrocausa que destapó una enorme de red de prostitución en la provincia de Lugo hace más de una década, está un paso más cerca de llegar a su fin. La Audiencia Provincial lucense juzgará a cinco acusados en el mes de junio. Serán ocho sesiones, los martes y miércoles de cada semana, entre el 4 y el 26 de ese mes. 

La Operación Carioca arrancó el día de Nochebuena del año 2008. Entonces, la jueza Pilar de Lara Cifuentes abrió unas diligencias previas que terminarían componiendo la mayor causa judicial registrada en España a nivel de volumen. 16 años, 89 imputados, 46 detenidos, 367 testigos, 310 tomos y 160.000 folios después, la pieza original de la macrocausa tiene ya fecha de juicio.

Los días 4, 5, 11, 12, 18, 19, 25 y 26 de junio acogerán las ocho sesiones del juicio. En esas fechas, cientos de personas pasarán por la Sala Segunda de lo Penal para explicar qué ocurrió durante aquellos años en los prostíbulos más populares de la provincia, como el Queen's, el Eros o el Eclipse. 

Cinco personas se sentarán en el banquillo de los acusados. Tres de ellas serán los proxenetas que gestionaban estos clubes, y los otros dos son agentes de la Guardia Civil que, presuntamente, los protegieron a cambio de favores.

El protagonista de la causa, que también lo será del juicio, es Armando Lorenzo, cabo de la Guardia Civil de Lugo y miembro de la Unidad de Menores y Mujeres. Su figura es clave en el procedimiento, ya que, según la Fiscalía y la jueza, el supuestamente encargado de defender los derechos de estos ciudadanos era colaborador activo en una trama de explotación sexual y abusos, en connivencia con varios de los proxenetas más conocidos de la provincia lucense.

La fiscal pide para él 21 años de prisión. La gran mayoría de la pena solicitada corresponde a un presunto delito de agresión sexual, por el que le asigna 11 años. Según el escrito de acusación, a finales del año 2008, habría violado a una prostituta tras amenazarla con una pistola. Además, se le acusa de otros cuatro delitos de agresión sexual menor gravedad (4 años y 8 meses), de solicitud de favores sexuales por funcionario público (11 meses), de cohecho (1 año y 11 meses), de omisión del deber de perseguir delitos, de favorecimiento de la prostitución, de tentativa de extorsión y de revelación de secretos.

A la izquierda, Armando Lorenzo, cabo del Equipo de Personas y de la EMUME de la Comandancia de la Guardia Civil de Lugo. A la derecha, Julio Baquero, su jefe. Ambos continúan figurando como procesados en la causa original de la Carioca
A la izquierda, Armando Lorenzo, cabo del Equipo de Personas y de la EMUME de la Comandancia de la Guardia Civil de Lugo. A la derecha, Julio Baquero, su jefe. Ambos continúan figurando como procesados en la causa original de la Carioca

El segundo acusado es el jefe de Armando Lorenzo, Julio Baquero, mando de la Unidad de Menores y Mujeres. Este agente no solamente conocía y consentía los delitos de su subordinado, sino que, según las fiscales que firman el escrito, llegó a colaborar con él para beneficiarse de los mismos favores que el cabo. Para él, las fiscales piden un año y siete meses de prisión, mucho menos de lo que solicitaba la jueza Pilar de Lara Cifuentes, que instruyó la causa. Se le imputan un delito de abuso sexual, solicitud de favores sexuales por funcionario público y omisión del deber de perseguir delitos.

Tres conocidos por la justicia: Ascariz, Adán y Suso González

Los tres últimos acusados son tres de los proxenetas más conocidos de la provincia. José Marcos Grandío Ascariz (dueño del club Eros), José Manuel García Adán (dueño del club Queens) y Jesús «Suso» González Varela (dueño del club Eclipse) se sentarán en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial de Lugo el próximo mes de junio, pero solamente por delitos menores. Las fiscales piden para ellos entre 1 año y 1 año y medio de prisión y una multa de entre 6.000 y 15.000 euros por un delito de cohecho pasivo, al considerar que se aprovecharon de las figuras de Lorenzo y Baquero para conseguir protección policial y que no se investigasen ni castigasen los delitos que se cometían en sus clubes de alterne.

La causa será juzgada por el tribunal de la Audiencia Provincial de Lugo, experta en macrocausas, ya que ya se ha enfrentado a otras piezas de esta misma operación y de la Pokémon, otro procedimiento de un tamaño solo comparable al de la Carioca. Por el momento, las partes no han llegado a un acuerdo de conformidad, pero esa posibilidad sigue sobre la mesa.