La Xunta proyecta 2,3 millones para la necesaria reforma de la carretera de Baralla a la A-6

Suso Varela Pérez
suso varela LUGO / LA VOZ

LUGO

Pide al Gobierno fondos europeos para reponer una histórica demanda

09 abr 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Ahora que se cumplen 20 años de la apertura de la A-6 en la montaña lucense se constata que las villas, salvo Pedrafita, quedaron no solo afectadas por la ausencia de vehículos si no que también alejadas de la nueva carretera.

Un ejemplo es Baralla y los 4,5 kilómetros de la vía autonómica LU-710 que une la villa con la A-6 por el hermoso paraje de Neira de Rei, pero que para los conductores es un suplicio de baches, curvas, ausencia de arcenes, carencia de señales horizontales y verticales, falta de quitamiedos y zona estrechas donde apenas caben los camiones.

La Xunta arregló esta carretera en sentido Baleira, lo que permite la conexión con la autovía para los vecinos de la comarca de A Fonsagrada y Castroverde, pero quedó pendiente el tramo hacia Baralla. El gobierno gallego, a través de la Axencia Galega de Infraestruturas, está redactando un proyecto de condicionamiento de estos 4,5 kilómetros, «que se está supervisando e se está preparando para ser sometido a información pública, xa que se trata dunha actuación que require de expropiacións», explica la Consellería de Infraestruturas.

La inversión que prevé la Xunta para esta carretera es de unos 2,3 millones, o lo que es lo mismo, medio millón de euros por kilómetro. Un presupuesto tan alto ha obligado a la Xunta a incluir esta carretera entre las propuestas que le remitieron al Ministerio de Transportes para su financiación por parte del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia de los fondos europeos Next Generation, habilitados por la Unión Europea de modo extraordinario para permitir la recuperación económica tras la crisis sanitaria. Desde la consellería destacan que este proyecto encaja dentro de la línea «Acondicionamento de estradas convencionais para mellora da accesibilidade no rural». La propuesta fue remitida al Gobierno el 25 de enero, pero aún no han recibido respuesta sobre su aceptación.

Hay que recordar que durante el bipartito PSOE-BNG en la Xunta se hizo un proyecto de reforma integral de la LU-710 desde Baralla hasta Baleira, quedando licitado en el 2009 en 11 millones. Ya con el PP en el gobierno se ejecutaron las obras de reforma entre la A-6 y Baleira, pero quedó pendiente el tramo de Baralla. El entonces conselleiro popular Agustín Hernández se comprometió a terminar las obras con las mismas características que el resto de la vía: nueve metros de ancho, así como variaciones en el trazado para corregir curvas.

Pero pasaron los años y la carretera siguió empeorando. Incluso, hasta en la Escola de Camiños de la Universidade da Coruña se llegó a presentar una tesis doctoral que proponía un proyecto de reforma integral. Y hasta el grupo del PP en el Parlamento llegó a instar en el 2018 a la Xunta al arreglo de esta vía. Ahora parece que por fin se va a acometer esta histórica demanda de vecinos y conductores.