Juzgados dos cacos persistentes que «visitaron» cuatro veces el mismo hipermercado

Enrique Gómez Souto
enrique g. souto LUGO / LA VOZ

LUGO

PEPA LOSADA

El fiscal pide 18 meses de prisión y no se opone a suspender la pena

20 dic 2018 . Actualizado a las 22:32 h.

Los centros comerciales y los grandes supermercados son imanes que atraen a los amigos de lo ajeno, que en algunos casos intentan una y otra vez superar con éxito la barrera de las cajas sin hacer frente al importe de la mercancía. Eso ocurrió recientemente en Ribadeo, en el centro comercial Eroski, de acuerdo con el relato que hace la fiscalía sobre la actividad de dos acusados de un delito continuado de hurto, que ayer se sentaron en el banquillo en el Juzgado de lo Penal 2.

Uno de los acusados no tiene antecedentes penales. El otro fue condenado al menos en tres ocasiones por hurto. Según la acusación pública, los dos procesados fueron sorprendidos por el vigilante de Eroski de Ribadeo el 4 de octubre de 2017 cuando trataban de esconder una bolsa de papel de aluminio, forrada con cinta de embalar, en un coche. Llevaban dos discos duros, una cámara de fotos digital, dos navegadores y dos destornilladores, todo ello valorado en 665 euros. No fue la única vez que estos dos acusados visitaron con intenciones similares el citado establecimiento. Según el fiscal los hicieron también el 24 de julio de este año, y se llevaron dos tabletas y aspiradores: el 19 de septiembre, para sustraer juegos variados de videoconsola. En septiembre intentaron, siempre según la fiscalía, apoderarse de varios videojuegos, sin conseguirlo. Sí lograron apropiarse de una bicicleta eléctrica, valorada en 999 euros.

La fiscalía pidió inicialmente para cada uno de los acusados una pena de dieciocho meses de prisión, así como la indemnización al establecimiento comercial con 2.524 euros. La fiscalía ya indicaba en su escrito de acusación que no se opondría a la suspensión de la aplicación de la pena privativa de libertad.

Por otro lado, en el Penal 1 estaba fijado para ayer el juicio a dos mujeres acusadas de robo con violencia o intimidación en el establecimiento LIDL de la capital lucense. Según la fiscalía, el primero de octubre de 2016, alrededor de las 18.55 horas, las dos acusadas entraron en el citado establecimiento, cogieron productos alimenticios y pasaron la línea de cajas sin abonar el importe correspondiente. Dos empleados del establecimiento se pusieron delante, para impedirles salir. Fueron empujadas y agredidas, de modo que sufrieron lesiones en las manos. La fiscalía pide un año y tres meses de prisión, por robo con violencia, y una multa de dos meses a razón de seis euros por día por un delito leve de lesiones. Pide también una indemnización de 60 euros para una de las trabajadoras y de 210 para la otra.

Cartera sustraída

En el mismo juzgado estaba fijado para ayer el juicio a un hombre acusado de un delito de hurto. Según la fiscalía, el 2 de abril de 2016, sustrajo en la calle Duquesa de Alba, en Monforte, un bolso que contenía diversos efectos, entre ellos una cartera de piel con 15 euros.

Para dos acusados de hurtos, la fiscalía no se opone a la suspensión de la pena de prisión

Dos empleadas de un centro comercial en la capital, lesionadas al evitar un robo