LA TRIBUNA | O |
27 abr 2004 . Actualizado a las 07:00 h.El centro derecha en la zona sur de Lugo, y en toda Galicia, debería cambiar y pronto, porque corre peligro. Vimos en las pasadas elecciones nacionales como el PSOE ganaba, no por los atentados, como dicen, sino por la imagen, esa imagen de líder joven, agradable, simpático y con promesas concretas que entendemos todos. Por el contrario, tenemos un Partido Popular anquilosado en el pasado y sin trazas de cambiar, aunque Aznar hizo un gran esfuerzo por rejuvenecer, pero se olvidó de esta provincia. No me entra en la cabeza que la gente joven, los inmigrantes que cada vez son más, y otros grupos específicos vayan a votar en unas elecciones, por ejemplo al Señor Cacharro, que viene a Monforte a decirnos que debemos recuperar el trigo del país en el Pazo de Tor como fuente de riqueza. Al Señor Fernando Carlos que quiere una corredoira Monforte-Lugo y no una autovía, a la Señora Tapia que vota en contra de esto mismo, o al Señor Padilla, que utiliza el congreso para dormir (foto divulgada por miembros de su propio partido). Todos estos y algunos más le sacan las ganas a los jóvenes de votar por una opción de centro derecha. Muchos pensamos que hay que dar un cambio, pero falta que los que deciden también lo digan. No se debe tener miedo a un cambio. La prueba la tenemos en el PSOE. Recientemente me llenó de satisfacción Joaquín García Díez en las listas al Congreso, después de unos años sabáticos no se sabe si por iniciativa propia o forzado. Creo que puede ser el revulsivo y el referente del centro derecha en Lugo. No olvidemos que fue alcalde en Lugo con mayoría absoluta y ahora ni con los «galácticos» se recupera. Quizás con el apoyo de algunos más como el Señor Sousa si cambia su postura de apoyo a estos personajes.