Felipe VI se reúne con Arévalo y asiste en Guatemala a su toma de posesión

La Voz REDACCIÓN

INTERNACIONAL

Felipe VI y Mario Búcaro, ministro de Relaciones Exteriores de Guatemala, ayer en el aeropuerto de la capital del país
Felipe VI y Mario Búcaro, ministro de Relaciones Exteriores de Guatemala, ayer en el aeropuerto de la capital del país MINISTERIO DE RELACIONES EXTERIO | EUROPAPRESS

Una decena de mandatarios iberoamericanos asistieron a este acto

14 ene 2024 . Actualizado a las 20:16 h.

El presidente electo de Guatemala, Bernardo Arévalo de León, recibió al rey de España, Felipe VI, en un encuentro previo a la investidura del nuevo mandatario del país centroamericano, que tuvo lugar ayer. «Es usted el primero y es un gusto que sea el primero», dijo Arévalo de León al iniciar la reunión con el rey, en referencia a que fue el primer jefe de Estado con el que compartiría un encuentro antes de su investidura. Felipe VI y una decena de mandatarios iberoamericanos asistieron a este acto, que se celebró en la Iglesia de San Francisco de la capital guatemalteca.

Arévalo llega a la presidencia del país después de conseguir un 60 % de los votos la segunda vuelta de las elecciones celebradas el pasado 20 de agosto, y después de superar todos las amenazas, impugnaciones y pegas judiciales que todos los partidos opositores, entre ellos el del presidente saliente, han utilizado para intentar abortar su triunfo en las urnas.

Arévalo, de 65 años, también ha necesitado de la advertencia de Estados Unidos de suspender la cooperación con Guatemala para garantizar su investidura. «La esperanza es sabia, y sabe que ni la más oscura noche ha vencido al amanecer. Nos vemos el 14», escribió el presidente electo hace unos días.

Político tardío

Arévalo llegó tarde a la política, algo que pocos podían imaginar teniendo en cuenta que es hijo del considerado primer presidente votado en unas elecciones transparentes en Guatemala, Juan José Arévalo Bermejo (1945-1951), después de una dura dictadura que cayó en 1944 como consecuencia de la revolución de octubre de ese año. Pero desde que Arévalo hijo aceptó ser el candidato del Movimiento Semilla ha asumido el papel de convertirse en el hombre que conducirá al país a un mejor futuro. Su gran aspiración es «reconstruir una Guatemala en la que caben todos, menos los corruptos, violentos y autoritarios». Una mayoría de guatemaltecos tiene plena confianza en él y sus mensajes de esperanza en las redes sociales han encontrado respuestas en muchos ciudadanos que desean regresar a su país, la novena economía de Latinoamérica.