Adrián Barbón: «Óscar Puente conoce el noroeste y sabe de la importancia que tiene el corredor atlántico

GALICIA

Adrián Barbón en su despacho
Adrián Barbón en su despacho Tomás Mugueta

El presidente del Principado de Asturias asegura que mantendrá los compromisos de la cumbre de Santiago

02 feb 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Adrián Barbón tiene claro que la llegada de la alta velocidad supone un antes y después para Asturias. Destaca el impulso que supondrá la puesta en funcionamiento de los trenes AVRIL en primavera, que permitirá aumentar frecuencias y pasajeros, y la de los trenes de bajo de coste de Renfe (Avlo). En materia de infraestructuras también pide avances en la conexión del suroccidente de la región con la provincia de León y deja claro que, por muchas veces que se repita lo contrario, en Asturias se vive ahora mejor que en las décadas pasadas. Y justifica su respuesta con varios ejemplos. 

-Llegarán los Avril en primavera. ¿Conoce la fecha? ¿Cómo será el reparto de vehículos en el noroeste, entre Asturias y Galicia?

-En el noroeste repartimos pero también compartimos los trenes, los Alvia que circulan ahora por Asturias y en Galicia van alternando las comunidades. La certeza la vamos a tener muy pronto porque el ministro próximamente va a anunciar la fecha y me tengo que remitir a su anuncio por respeto. ¿Qué suponen estos trenes Avril? Pues lo primero que los trenes directos entre Oviedo y Gijón y Madrid estarán por debajo de las 3 horas; es un salto de calidad fundamental. Y segundo que va a entrar en funcionamiento un tren Avilés-Madrid que ahora no existe y que no es solo que beneficie a Avilés, sino a toda la gente del occidente. Los Avril no sólo son más veloces, sino mucho más grandes y encima va a haber un low cost, los Avlo. De cara al futuro la petición que estoy haciendo es que haya más operadores. Yo creo que esta línea es rentable y espero que no dentro de muchos años veamos también operadores privados como ya hay en otras líneas. 

«Esta línea es rentable y espero que no dentro de muchos años veamos también operadores privados»

-¿Habrá más promociones de billetes como la que se lanzó con la apertura?

-Va a haber 200.000 billetes a bajo coste, que creo que son hasta 20 euros. Eso es un paso importante que hace en este sentido Renfe, la operadora, y que me parece fundamental. Porque está claro que cuando los precios son asequibles la gente viaja y el tren, desde luego, es una alternativa fundamental.

-Siempre hablamos de los pasajeros y esa línea es importante pero la Variante también ha sido una oportunidad para las mercancías. Y no sólo la Variante, días atrás el ministro Óscar Puente reconocía que va mucho más lento el corredor Atlántico que el Mediterráneo, ¿qué sabe el Gobierno de Asturias al respecto?

-Primero quiero decir que el hecho de que la variante se utilice para mercancías costó mucho, y hubo retrasos porque en dos ocasiones un expresidente el Principado que fue ministro de Fomento y que fue vicepresidente, el señor Francisco Álvarez Cascos, pudo imponer un rediseño utilizando su voto en el Congreso en los presupuestos de la época de Mariano Rajoy para impedir que las mercancías viajaran por la variante. Para mi predecesor en el cargo, para Javier Fernández, esta era una de sus posiciones políticas claves y yo la compartí desde el principio. Le pedimos al Gobierno de Pedro Sánchez que rehiciera eso para que permitiera el tráfico mixto de mercancías. Primero porque es una obra de 4.000 millones de euros que permite mayores velocidades y mejores convoyes de mercancías, abaratando costes hasta dos tercios. Tiene todo el sentido del mundo explotar esto. Respecto al peaje del Huerna decía mi amigo Iván Fernández en la Comisión Ejecutiva Federal que para hablar de este tema el PP debería empezar por pedir perdón a los asturianos y que si no debían permanecer callados. Para la variante, lo mismo, ¿cómo se atreven a juzgar un logro así los que la paralizaron durante años? Con Óscar Puente tenemos suerte, es un hombre que conoce perfectamente el noroeste, sabe la importancia que tiene y es algo que tratamos de forma reciente en la visita que tuvo con el rey. Yo creo que vamos a ver efectos concretos más allá de la Macrorregión, que es una reivindicación que tenemos compartida con el lendakari y con el presidente de la Xunta y el entonces presidente de Cantabria, la pasada legislatura.  

-Ha habido cambios en esos gobiernos de forma reciente. Usted mantuvo una alianza con Feijoo y luego con Rueda en Galicia, que ahora tiene elecciones, Urkullu no seguirá y Revilla sigue siendo su amigo pero ya no es presidente, ¿se mantendrán eso acuerdos entre comunidades?

-Los documentos firmados yo los mantengo, no sé qué harán otras comunidades. Mantengo por supuesto la posición común que pactamos ocho comunidades en la cumbre de Santiago sobre financiación autonómica, pero a quien corresponde decir si la mantiene es a Alberto Núñez Feijoo. Cuando como presidente del PP presente su propuesta de reforma de financiación autonómica le recordaré lo que firmó como presidente de la Xunta. Este problema no es ideológico sino entre territorios, unos defienden que se mida sólo el número de habitantes y otros decimos que no cuesta lo mismo prestar la atención sanitaria en Asturias que en Valencia, por nuestra forma de vida, por nuestra población dispersa. Por nuestro largo centenar de centros de salud, de consultorios periféricos frente a la realidad que existe en otros territorios y que apenas ha evolucionado. O también en la educación, no es lo mismo mantener escuelas rurales de tres alumnos y cuatro como hacemos en Asturias. En otras comunidades se cierran, en Asturias no queremos porque sabemos que son vitales para la continuidad de los pueblos. Con Revilla efectivamente mantengo la relación todavía, el otro día estuve en su cumpleaños y luego él estuvo de visita en el estand de Asturias en Fitur, porque hay vínculos que van más allá de lo político, son de afecto sincero.

-Inaugurada la Variante de Pajares, la gran obra pendiente en infraestructuras es la Autovía de La Espina. ¿En qué fase está y qué plazos manejan?

-Lo primero es avanzar en la culminación de la obra tal y como está proyectada en este momento, que finaliza en La Espina. Nosotros lo tenemos claro. La cuestión es ver qué va a pasar en el futuro, cuál es la planificación de conectividad del futuro. Nosotros ya hemos hecho un avance, que es la conexión, a través de Degaña, de Valdeprao, que ahí hay una conexión con León rápida. La carretera estaba en bastante buen estado, nosotros hemos hecho algunas mejoras y falta que en la parte leonesa se haga. Vamos a ver qué pasa ahí, pero sería fundamental ir articulando las conexión del suroccidente asturiano con la provincia de León.

«Sería fundamental ir articulando las conexión del suroccidente asturiano con la provincia de León»

Los vínculos con León cada vez van a ser más fuertes. Hace poco, recordarán, estuve en una visita institucional en la Diputación de León y en el Ayuntamiento de León. Históricamente, y permítame que me remonte muy atrás, descendemos de un mismo pueblo, los astures, el origen de las tribus astures estaba claro en aquello de los astures cismontanos y trasmontanos. Más allá en el tiempo, el Reino de Asturias, su continuidad histórica que es el Reino de León, y más reciente todavía la etapa de Belarmino Tomás, como presidente del Consejo de Asturias y León. Siempre ha habido vínculos entre los dos y no se fraguó una comunidad de Asturias y León porque no quiso en su momento el Gobierno central. Estoy remontándome a los años 78 y 79, porque es verdad que hubo algún propósito de una comunidad asturleonesa. Quedó frustrado y ya está, pero más allá de eso es verdad que nos unen unos vínculos comerciales, turísticos y sentimentales. Por todo ello, yo creo que hay que avanzar en esa conexión del suroccidente y ver veremos la fórmula.

-La A-8 también presenta tramos en los que hacen falta mejoras. ¿Está esa vía entre sus reivindicaciones al Gobierno central? 

-Toda infraestructura necesita mantenimiento. España tiene un problema y es que ha avanzado muchísimo en la creación de redes de comunicación, pero ahora cuesta mucho mantenerlas. En Asturias, en los últimos años hemos girado de la política inversora de nuevas carreteras a la de mantenimiento. Por ejemplo, de nada te sirve tener conexiones que has hecho hace 20 años si estas están muy deterioradas. Yo creo que, lógicamente, esos análisis se tienen que hacer y se están haciendo desde el Gobierno central. Se trata del mantenimiento de nuestra red viaria porque es verdad que hay un déficit como consecuencia de que se han hecho muchísimas carreteras. Cuando hay gente que dice que en Asturias vivíamos mejor hace 50 años, antes de la autonomía, yo digo que no. Pero no es que lo diga yo, es que lo dice la gente que vivió aquella época. Eso es mentira, lo que pasa que como siempre dice Pablo García, que acabamos de anunciar que va a ser una de las medallas de Asturias, que es un referente ético en la política asturiana, siempre dice que «no es que cualquier tiempo pasado fue mejor, es que en cualquier tiempo pasado nosotros éramos más jóvenes». Y entonces lo recuerdas con una especial nostalgia o señaldá, palabra en asturiano que me encanta, pero no es así. No puede ser comparable tener unos hospitales envejecidos y concentrados en el centro, a ser una comunidad que tiene 8 hospitales de referencia comarcal más otros tres importantes en el territorio. 

«La economía en los 70 y los principios de los 80 en Asturias era ficticia. Estaba sustentada en pies de barro porque todas las empresas públicas eran deficitarias»

-¿Se vive mejor ahora en Asturias que entonces?

-No se puede decir esto de cualquier tiempo pasado fue mejor porque no es verdad. Lo que pasa es que la economía en los 70 y los principios de los 80 en Asturias era una economía ficticia. Era una economía sustentada en pies de barro. ¿Por qué? Porque todas las empresas eran deficitarias. Eran empresas públicas deficitarias, en absoluto competitivas, y lo que suponía, que era un engrase de millones y millones de las antiguas pesetas para sostener esa ficción. Hoy la economía se ha diversificado. Claro, quién lo iba a decir cuando Pedro De Silva lanza aquello de «Asturias Paraíso Natural», en 1985, y se reían de él porque decían que cómo Asturias iba a ser un atractivo turístico para nadie. Pues aquí tenemos los datos. Ahora hablamos del riesgo de un turismo excesivo. Hace 40 años se reían del presidente Pedro De Silva por decirlo. Fíjese, yo lo decía antes, para mí es el arquetipo del mejor presidente en cuanto a visionario. 

«Hay que perder el miedo a decir que somos asturianistas»

-¿En qué sentido?

-Además de en el tema del turismo, en una cuestión que a mí me gusta y que yo comparto. Hay que perder el miedo a decir que somos asturianistas. En Galicia, todos los partidos que ahora están en elecciones dicen que son galleguistas. Yo digo que el socialismo asturiano es asturianista y hay gente que se rasga las vestiduras. Pero, ¿por qué? Desde cuándo es contradictorio con nuestra ideología identificarte o tener tu identidad clara como asturianos. Manuel Fraga, con el que no creo ser sospechoso de simpatizar desde el punto de vista político, decía aquello de que «ser gallego es mi forma de ser español en el mundo». Pues la mía es ser asturiano. Y el presidente Pedro De Silva lo tenía claro, porque sabía que la reivindicación de la identidad, sus elementos tradicionales, la reivindicación de su historia, de su cultura y de sus lenguas era una forma inequívoca también de reforzar la autoestima y afrontar los problemas. La autonomía asturiana se creó no sólo para reivindicar una identidad, que está muy bien, sino también para que fuera útil a esta identidad.

-Transportes dio por sentado que habrá nuevas bonificaciones en el Huerna. ¿Ya saben exactamente el ahorro que va a suponer y cuándo entrará en vigor?

-Las estamos negociando todavía. Lógicamente, tiene que ir parejo a los presupuestos de España a nivel nacional, que vamos a ver cuándo se aprueban. Pero sí que ahí vimos buena sensibilidad tanto del secretario de Estado como del ministro, y esto es una buena noticia. Frente a los que dicen que el peaje del Huerna debe desaparecer, recuerdo lo que dijo el otro día Iván Fernández, y qué razón tenía, «que lo diga el PP, cuando el PP lo único que tendría que decir es pedir perdón o guardar silencio, ¿no?» Recuerdo que si tenemos peaje desde el 2021 es por ellos. Nosotros lo que estamos haciendo, sabiendo que rescatar el peaje supone 1.300 millones de euros, aproximadamente, y que no tenemos capacidad para hacerlo ni Asturias ni el Gobierno central, es ir avanzando en las bonificaciones hasta llegar a un momento que el peaje sea mínimo o casi inexistente. Yo tengo buenas sensaciones y esperanza.

«Queremos seguir avanzando en las bonificaciones hasta llegar a un momento que el peaje sea mínimo o casi inexistente»

Esto de que el PP pida perdón me recuerda que el año que viene también es otro aniversario. Se cumplen 30 años de la llegada de Sergio Marqués a la presidencia del Principado. El PP ahora parece que quiere reivindicar su figura, pero quiero recordarles que el único que lo ha hecho, dándole reconocimiento institucional al conceder su nombre a una sala de esta Presidencia del Principado, fui yo con motivo del 35 aniversario de la reforma del edificio. Yo creo que no estaría mal, para ser creíbles, que el PP pida perdón por lo que le hicieron y que sufrieron muchos de sus compañeros, familiares y amigos.