«Antes de la beca de la Barrié, yo pensaba ser veterinario en mi pueblo»

Sara Carreira Piñeiro
Sara Carreira REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

Exbecarios de la Fundación Barrié. De izquierda a derecha: Ángel Abuelo, Mónica Cartelle, Carlos Casquero y Mireya Represas
Exbecarios de la Fundación Barrié. De izquierda a derecha: Ángel Abuelo, Mónica Cartelle, Carlos Casquero y Mireya Represas

Cuatro exbecarios cuentan su experiencia con las ayudas de la fundación gallega

29 ene 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

«Antes de la beca de la Fundación Barrié, yo pensaba ser veterinario en mi pueblo». Ángel Abuelo, santiagués con familia en Arzúa, es doctor en Veterinaria, investigador y profesor en la universidad del estado de Míchigan (Estados Unidos), y representa como nadie el espíritu de las ayudas que la Barrié ofrece cada año. En su caso, la beca fue de posgrado, tras la carrera, y lo llevó en el 2013 a la Universidad de Cornell, en Nueva York. Ahora, desde su puesto consolidado, Ángel se ha convertido en mentor de unas nuevas ayudas de la Fundación Barrié: las becas de verano para universitarios.

Otra exbecaria de la Barrié y alma del nuevo programa es Mónica Cartelle, que en el 2008 dejó su A Coruña natal para hacer el posgrado en Nottingham de la mano de la fundación y ahora, radicada desde hace años en Luisiana (Estados Unidos) ha impulsado las becas de verano. Lo ha hecho gracias al convencimiento Carmen Arias, la directora de la Fundación Barrié. Ella tomó hace unos años el relevo de su padre, José María Arias, fallecido el pasado diciembre. Él fue quien diseñó las becas de posgrado y Carmen ha ampliado su programa, lo ha adaptado a las condiciones actuales de la sociedad y así ha agrandado su legado: «La idea es contribuir al desarrollo de Galicia», dice.

Cuando Carmen tomó las riendas de la fundación descubrió que algunos de los antiguos becarios de la Barrié querían hacer algo por Galicia y la fundación pero, como estaban trabajando fuera de España, lo tenían complicado. Entonces, «dándole muchas vueltas» se les ocurrieron los programas de investigación del verano, que proporcionan a los universitarios una experiencia única, y que la Barrié mima especialmente: «Nos preocupamos mucho para que las dos partes ganen». Y es que hay diferencias sustanciales entre ambos proyectos: el de posgrado es básicamente un apoyo económico, porque el aspirante ya ha sido admitido en un máster y la Barrié le financia todos los gastos para que pueda estar centrado en su formación; pero en el proyecto de verano, la Barrié elige a los aspirantes y los envía a diferentes laboratorios de Estados Unidos y Gran Bretaña.

Por eso, por una parte, buscan entre los alumnos los mejores, porque en cierto sentido la Barrié es la responsable de la selección, pero por otra también les preocupa el laboratorio de destino: «Nos gusta saber que los becarios van a estar atendidos», apunta Carmen, y así rechazan opciones en las que haya un ambiente tóxico. «Buscamos que sea una experiencia enriquecedora, que les haga ganar currículo, claro, pero que sirva a su desarrollo personal y para aclarar las ideas de lo que quieren hacer».

Eso le pasó a Mireya Represas, gallega que estudiaba Bioquímica y Ciencias Biomédicas en Valencia y se pasó el verano del 2022 en un laboratorio de microbiología de la Universidad de Luisiana bajo la supervisión de Mónica Cartelle: «Yo sabía que me gustaba la investigación, y especialmente del cáncer, pero no sabía qué campo», y lo que nunca habría esperado «es acabar en investigando en virología». «¡Qué también es investigación del cáncer!», puntualiza Mónica. Mireya está ahora completando sus estudios de doctorado en el mismo laboratorio y también con una de las becas Barrié.

El salto personal y profesional que suponen estas ayudas a la investigación es enorme. Y los becarios recalcan la confianza que las becas les han supuesto. Mireya asegura que no sabía que era buena para investigar hasta que se encontró con la Fundación Barrié: «Fue un antes y un después —reconoce— porque al apostar por mí me dieron más confianza en mí misma y en mi potencial de investigadora». Mónica lo corrobora: «Yo he tenido becas en mi carrera, pero lo de la Barrié es diferente, porque formas parte de la familia, es algo que no me pasó más». Lo mismo asegura Ángel; su experiencia fue tan buena que por eso se ha animado a sumarse a los nuevos programas como mentor, para «devolver algo a los que invirtieron en nuestra carrera».

También destacan todos el buen nivel formativo que tienen los españoles. Mónica apunta que en su laboratorio la participación de Mireya no ha pasado inadvertida: «A mí me preguntan ‘‘oye, de dónde sacaste a Represas, que es muy buena'', y yo, claro, no puedo estar más orgullosa». Carlos Casquero, que acaba de terminar la carrera de Bioquímica con un programa de Business en Madrid, fue becario el pasado verano en el University College London (UCL). Él se dio cuenta como becario de que el nivel español es muy bueno, con un componente práctico muy alto,mejor que en otros países: «Tenemos una base muy sólida», asegura. 

«Animo a todos a apuntarse. No hay que tener un 9,5»

Mireya tampoco lo duda: «Hasta que apliqué me daba la sensación de que o tenías un 9,5 de media o no ibas a ser una buena investigadora. Pero la Barrié me demostró que no es así. Es más que estudiar cuatrocientas horas. Es tener pasión e ilusión, yo viví con mucha ilusión todo el proceso, y también demostrar trabajo, compromiso, curiosidad». Ella cree que hay estudiantes que no aplican porque no tienen ese 9,5 de media que se puede suponer indispensable y así se pierden talentos: «Es un mensaje que creo que debo dar. Tener un nueve no lo es todo —repite— valen más otras cualidades, como la capacidad de esforzarte e insistir aunque no tengas los resultados que deseas, no dudar en seguir luchando». 

Las becas de la Barrié

universitarios 

La Summer Undergrate Fellowship Program son 10 becas para que estudiantes de carreras de biociencias (ni en el primer ni en el último año) vinculados a Galicia hagan investigación durante 9 semanas en verano en centros de prestigio en EE.UU. y Gran Bretaña con todos los gastos pagados. El plazo para inscribirse termina el 5 de febrero.

Graduados

El Programa de Becas de Posgrado en el Extranjero es el tradicional: 10 becas para graduados universitarios vinculados a Galicia que hayan sido admitidos en un máster internacional y de prestigio. Tendrán todos los gastos pagados (durante un año y prorrogable uno más si el máster lo exige). El plazo de presentación de candidaturas termina el 23 de febrero.

doctorado y postodoctorado

Desde el año 2021, los programas anteriores se completan con uno de cuatro becas doctorado (Doctoral Fellowship Program) con una duración de tres años y otro de investigación posdoctoral para dos personas (Postdoctoral Fellowship Program) por al menos cuatro años. Los candidatos deben tener vinculación con Galicia y ambos programas se desarrollan en Luisiana (EE.?UU.)