Leiceaga, el hombre que siempre estuvo donde la política lo llamó vuelve a la universidad

s. l. SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Leiceaga, fotografiado esta semana en Santiago
Leiceaga, fotografiado esta semana en Santiago Sandra Alonso

Xaquín Fernández Leiceaga no recogerá su acta de concejal en Santiago y regresará a la docencia

09 jun 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Veinte años después de transitar del BNG al PSdeG, Xaquín Fernández Leiceaga ha optado por emular a Xosé Sánchez Bugallo y renunciar, como hizo quien le abrió entonces la puerta de las filas socialistas, a recoger su acta de concejal en Santiago. Con un matiz. Al contrario que el aún alcalde en funciones, que hace unos meses lo reclutó del Senado para su fallido intento de un sexto mandato, Xocas (Noia, 1961) no da un paso a un lado, sino que deja la política para retornar a la USC. Otra vez. Porque siempre que necesitó un respiro, lo encontró en las aulas.

De inquietudes políticas tempranas, participó en 1982 la asamblea fundacional del BNG, en Riazor. Tras un breve fogueo como concejal en su villa natal, priorizó la construcción de un denso currículo académico que lo llevó a desembarcar en la USC como profesor de Economía Aplicada.

Pero Xocas retornó en 1999 a la arena municipal, esta vez en Compostela. Lo hizo para formar parte, como edil del BNG, del primer gobierno de Bugallo salido de las urnas. A Leiceaga aún le faltaba transitar del Bloque al PSdeG, al que llegó en el 2003 tras la salida de Beiras de la portavocía nacional. Ya en la arena autonómica, trabajó con Touriño en la reforma del Estatuto que no fue. Y se recluyó de nuevo en la USC, después de que Pachi Vázquez tomara las riendas del PSdeG.

Retornó a la política para pugnar por la presidencia de la Xunta en el 2016, tras derrotar en primarias a Méndez Romeu. La vitola de buen gestor no le bastó para descabalgar a Feijoo. Tres años después fue elegido senador por representación autonómica. Hasta que la última llamada de Bugallo prologó otra etapa. Ante la intrincada transición que aguarda al socialismo compostelano, Xocas no dudó. Gana su universidad.