Un matiz importante que arroja dudas sobre la estancia del niño en el aseo

La Voz

GALICIA

17 ene 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Sabido es que el socorrista procesado no tenía que estar pendiente de la clase de Diego Novo aquella mañana. Si lo estaba fue porque la maestra titular de la clase de Diego tuvo que ausentarse del centro por un problema médico y le pidió que la sustituyera. Esta mujer explicó ayer que era habitual que si alguien faltaba pidiese a un compañero que cubriese su puesto. E interrogada por el protocolo de actuación cuando un alumno pedía ir al baño, reconoció que los niños no pueden quitarse solos la burbuja y en caso de que pidan ir al baño, «alguien lo debería acompañar». En cuanto al número de adultos que tienen que estar en la piscina, aseguró que aquel día «estaban bien representados, con una monitora en cada uno de los dos grupos que había en la piscina y un socorrista vigilando; si bien «lo habitual es que estén cuatro personas».

La monitora del otro grupo que se encontraba en el lado opuesto de la piscina, preguntada por las acusaciones si en días posteriores los compañeros habían comentado algo sobre el asunto, respondió que «habían dicho que Diego había pedido ir al baño». Pero Antonio Platas, que defiende a los responsables del colegio, le insistió sobre el asunto y al fin aclaró que «no es que pidiera ir al baño, sino que había ido al baño». La diferencia es importante toda vez que los imputados siempre negaron que el pequeño les hubiese pedido nada durante la clase.

La tutora de Diego Novo recordó durante la sesión de ayer que el pequeño tenía miedo al agua al principio del curso, pero luego se fue soltando y le gustaba.