«Lecciones de química», la serie es mejor que el libro

FUGAS

Si el libro de Garmus te sorprendió, su versión audiovisual, que pule algunas aristas, te hará disfrutar todavía más

12 dic 2023 . Actualizado a las 09:10 h.

Si la estética de Mad Men te fascina y todo lo que sea cocina y televisión te engancha, ya has encontrado tu serie para estas Navidades: Lecciones de química (Apple TV). Una historia en ocho episodios que combina el atractivo del diseño de los años cincuenta en Estados Unidos con los comienzos de los programas culinarios en la pequeña pantalla. Si ya has leído la novela de Bonnie Garmus en la que se basa, te esperan algunas sorpresas y además, de las buenas. Porque, por una vez y sin que sirva de precedente, la serie es mejor. Un novio atractivo, una vecina comprometida con la lucha por los derechos civiles y un perro casi mudo han contribuido a ello. Te lo cuento.

La esencia de la historia es la misma: Elizabeth Zott es una química, madre soltera, interpretada por Brie Larson (seguro que la conoces como capitana Marvel, aquí aborda un registro muy diferente) que sufre acoso y discriminación en el trabajo y acaba abandonando el laboratorio en el que ejerce como técnico para presentar un programa de cocina en televisión. Un show destinado a amas de casa que ella consigue convertir en algo único y diferente al combinar recetas, feminismo y una pizca de química. (Y con esto no te destripo la historia porque la serie comienza con ella entrando en el plató entre una fila de fans que la esperan).

El perro

Pero por el camino del papel a la pantalla algunos de los personajes principales que la acompañan en este recorrido han cambiado. Y muchos lo han hecho para bien. Así, por ejemplo, es una alegría que el perro de la familia (que se llama Seis y Medio y ha cambiado de raza) haya perdido protagonismo. En la novela sus pensamientos se hacían francamente tediosos. En la serie al can parlanchín solo lo sufrimos un episodio y ya sobra.

La vecina

También salimos ganando en el personaje de la vecina Harriet Sloane. Mucho más moderno que esa ama de casa sufridora y víctima de un marido alcohólico que planteaba la novela. Ahora, Aja Naomi King (que se hizo popular con el papel de Michaela Pratt en Cómo defender a un asesino) encarna a una abogada y madre de familia que lucha por los derechos de la comunidad en la que vive, planta cara a las discriminaciones y defiende los derechos civiles. Una lucha en la que caminará junto su marido, que ahora es un respetado médico militar destinado en Corea. ¡Vaya cambio!

Si Elizabeth sufría sexismo en el trabajo, Harriet lo va a multiplicar por dos, ya que además de mujer, es negra. Toda la historia da un giro radical y se hace más interesante. También el reverendo Wakely ha cambiado el color de su piel.

El sexismo en el lugar de trabajo está muy amplificado en la versión para la televisión. Los compañeros de trabajo de Elizabeth en el laboratorio Hastings, que ya eran odiosos, lo son todavía más y el ambiente se hace más tóxico al presentar una Elizabeth con menos categoría laboral. También hay un humillante concurso de belleza para las mujeres de la plantilla en la que fuerzan a nuestra protagonista a participar: un desfile de Miss Hastings donde las empleadas se muestran de forma ridícula ante la mirada masculina.

Entre las empleadas en el laboratorio, secretarias en su mayoría, figura Fran Frask. La relación de esta encargada de personal y Zott da un giro para la pantalla. Si antes ella se mostraba celosa y vengativa, ahora toda esa maldad y rivalidad femenina se convierte en un canto a la sororidad. Fran y Elizabeth, que comparten un pasado de traumas sexuales, harán un gran equipo. La relación entre las dos mujeres toma un giro más afín con los tiempos.

El novio

No podemos dejar pasar las diferencias en el personaje del protagonista masculino: Calvin. Destacado investigador y pareja de Elizabeth que increíblemente da vida para la pantalla el actor Lewis Pullman. Y digo increíblemente porque, según el libro, este químico introvertido tendría que ser desgarbado y feúcho. Y Pullman, lejos de eso, se come la pantalla. Tanto es así que el director Lee Eisenberg, a la vista de los resultados, (atención que sigue spoiler) hasta lo resucita de la tumba, para poder incluirlo en más episodios de los previstos inicialmente. Esta sorpresa no te la esperabas.

Hay más cambios, pero te dejo que los vayas descubriendo poco a poco...