A salvo los cuatro espeleólogos atrapados en una cueva cántabra, de la que han podido salir por su propio pie

La Voz REDACCIÓN

ESPAÑA

Imagen del Puesto de Mando instalado en el local de la Federación Cántabra de Espeleología de Arredondo, para seguir el rescate de cuatro espeleólogos que permanecen atrapados en el interior de la cueva Vallina, en el municipio cántabro por la crecida de un río subterráneo
Imagen del Puesto de Mando instalado en el local de la Federación Cántabra de Espeleología de Arredondo, para seguir el rescate de cuatro espeleólogos que permanecen atrapados en el interior de la cueva Vallina, en el municipio cántabro por la crecida de un río subterráneo Gobierno de Cantabria | EFE

La crecida de un río subterráneo los sorprendió y les impidió la salida. Esta madrugada, al bajar las aguas interiores, pudieron abandonar la cueva

04 mar 2024 . Actualizado a las 08:50 h.

Los cuatro espeleólogos que habían quedado atrapados en el interior de la cueva Vallina, en el municipio cántabro de Arredondo, por la crecida de un río subterráneo, han salido por su propio pie de la cavidad esta madrugada, después de que las aguas interiores hayan bajado.

Según ha informado esta mañana el servicio de emergencias 112 Cantabria, los cuatro hombres han salido al exterior de la cueva sobre la 1.30 horas de esta madrugada.

Los cuatro espeleólogos entraron en la cavidad hace varios días con otros tres para cartografiar el interior, pero estos últimos pudieron salir antes de que se produjera la crecida de las aguas subterráneas y avisaron de que sus compañeros se habían quedado dentro de la cueva.

Volvieron a acceder al interior de la cueva para comprobar que los atrapados estaban localizados y vieron que se encontraban «bien, tenían comida y habían montado un vivac», según explicaron la pasada noche de domingo a Efe fuentes del operativo de rescate.

El servicio de emergencias 112 Cantabria junto con la Guardia Civil, que trasladó a la zona agentes del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña (Greim), se ocuparon de ayudar a estos espeleólogos, que son profesionales en esta materia y lo que necesitaban eran unos neoprenos para cruzar el agua subterránea.