Pere Aragonès clama por un pacto fiscal y un referendo en su discurso navideño

Mercedes Lodeiro REDACCIÓN / LA VOZ

ESPAÑA

Pere Aragonès, durante su discurso navideño
Pere Aragonès, durante su discurso navideño Generalitat | EFE

El presidente catalán pide una «financiación singular» al Estado

26 dic 2023 . Actualizado a las 22:00 h.

Pacto fiscal y referendo de autodeterminación fueron los dos órdagos que el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, lanzó ayer en su tradicional mensaje por el Día de San Esteban a Pedro Sánchez para el 2024.

El presidente de la Generalitat retomó la exigencia que realizó en su discurso del año pasado sobre un referendo de autodeterminación pactado — entonces a cambio del apoyo de ERC para investir a Sánchez, como así hizo— y ahora acompañado de un concierto económico para Cataluña como en el País Vasco, ambas cosas para un año que llega y discurrirá marcado, señaló, por la aprobación de la ley de amnistía y su aplicación «plena», lo que permitirá, sostuvo, «recuperar la libertad y el regreso a Cataluña de las personas represaliadas por su compromiso con el referendo».

Sánchez y Aragonès coinciden en que el conflicto catalán debe resolverse desde la política, pero no en cómo. El líder socialista aboga por reforzar el autogobierno, mientras que el republicano insiste en reclamar la celebración de un referendo sobre la independencia tras el acuerdo de la ley de amnistía, necesaria «para abordar la siguiente fase de la negociación con el Estado: que Cataluña exprese su futuro en libertad votando sobre la independencia», alegó. De momento, el Gobierno se aviene a estudiar un pacto fiscal. Aragonès volvió a pedir ayer una «financiación singular» al Estado para poder «poner fin a un déficit fiscal insoportable». «Nos priva de destinar los recursos que ya pagamos, pero que administran otros, a mejorar la sanidad y fortalecer la educación [por debajo de la media española en el informe PISA]», afirmó. Y no dio por causa perdida el referendo, pese a que los socialistas sigan dando su negativa. Recordó que «no hace mucho decían que la amnistía era imposible». 

Más catalán y prosperidad

En clave interna, reclamó responsabilidad a los partidos para aprobar los presupuestos autonómicos «imprescindibles para seguir avanzando». Y no dejó de presumir de gestión como «la tasa de paro más baja en los últimos quince años», mejoras en la sanidad —aunque tiene a las enfermeras en huelga indefinida desde el día 12—, más mossos, más audiovisual que nunca para impulsar el catalán, idioma, recordó que ya se usa en el Congreso y que confían que se haga oficial en el Europarlamento, e incluso se vanaglorió del acuerdo para el traspaso de los trenes de cercanías y la gestión el ingreso mínimo vital. «El 2024 ha de ser el año que enfoquemos el camino para hacer de esta década la de la prosperidad [...] el del compromiso de todos con el catalán, con más presencia que nunca en todas partes [...] El 2024 ha de ser el de la segunda fase de negociación con el Estado donde Cataluña ha de decidir libremente su futuro», dijo.

La intervención de Aragonès desde el Depósito de rey Martí, un antiguo tanque de agua en la parte alta de Barcelona, buscó «poner de relieve el compromiso del Gobierno catalán» con la adopción de medidas para afrontar la sequía que sufre Cataluña, la peor en su historia, con embalses a poco más del 18 % de su capacidad, cortes diarios en 70 localidades mientras las dieciséis estaciones de esquí fabrican nieve gracias a sus embalses.

Fue el tercer discurso navideño de Aragonès. En el primero amenazó a Sánchez con la vía unilateral. «Debe ser el año en que la negociación con el Estado avance y comience a aportar resultados tangibles», proclamó desde una escuela en Santa Coloma de Gramanet (Barcelona), donde centró su alocución en el fallo judicial que obliga a impartir el 25 % de la enseñanza en castellano. Entonces, el Gobierno entregó la reforma del delito de la sedición y el de la malversación como moneda de cambio a apoyos en el Congreso. En el 2022, Aragonès retó a Sánchez a convocar un referendo pactado, a cambio del apoyo de ERC en el Congreso para ser investido de nuevo presidente del Gobierno este 2023.