Junts amenaza a ERC con romper el Gobierno catalán y presiona para iniciar otro «procés»

Cristian Reino BARCELONA / COLPISA

ESPAÑA

Laura Borràs, entre los exconsejeros Rull y Turull, en el congreso de Junts en Hospitalet
Laura Borràs, entre los exconsejeros Rull y Turull, en el congreso de Junts en Hospitalet Luis Vizcaíno | EUROPA PRESS

Cambia los estatutos para blindar a Laura Borràs y que no tenga que dimitir de la presidencia del Parlamento si es procesada por corrupción

18 jul 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Con apenas dos años de vida, Junts celebró este fin de semana en Hospitalet, segundo municipio de Barcelona y en el que no tiene ningún concejal, la segunda fase de su congreso. En la primera, la militancia otorgó el poder del partido al tándem formado por Laura Borràs y Jordi Turull, tras la renuncia de Carles Puigdemont a seguir liderando la formación. Lo que ha decidido Junts en esta segunda vuelta del cónclave es su estrategia política: la hoja de ruta secesionista y su papel en el Ejecutivo de coalición con Esquerra Republicana.

Aunque gobiernan juntos, ERC y Junts tienen planteamientos muy diferentes. Los posconvergentes aprobaron el sábado la ponencia política del partido, que apuesta por que el 1 de octubre, quinto aniversario del referendo ilegal del 2017, sea un punto de inflexión para empezar un nuevo procés. «Nos tendrán que frenar por la vía criminal, porque estamos determinados a avanzar por la vía civil», afirmó Borràs.

Junts aboga por liquidar ya la mesa de diálogo, en octubre, porque «anestesia», a su juicio, al secesionismo. E insta a ERC y a la CUP a poner en marcha la maquinaria para «activar» la declaración de independencia. «El trazado es solo independencia o independencia, no hay otro. No hay término medio», zanjó Turull en el congreso. Junts amenaza con romper la coalición de gobierno. El sector que procede de Convergència, más pragmático, no cede ante la presión de los más radicales, los de Borràs, y trata de llegar al menos hasta las municipales en el Ejecutivo.

El caso de Laura Borràs, que si es procesada podría ser destituida como presidenta del Parlamento autonómico, puede acelerar la convocatoria de una consulta a las bases y precipitar la salida de Junts del Ejecutivo. De entrada, cierran filas con ella y cambian sus estatutos para blindarla. Hasta ahora, y en línea con el Reglamento de la Cámara, si un afiliado es procesado por corrupción, se le suspende de militancia. La formación ha introducido una excepción, pensando en Borràs, que señala que no se producirá si se considera que hay «represión». Pero una primera consecuencia de la delicada situación judicial de la presidenta del partido es que Turull, secretario general y exdirigente de CiU, sale del congreso con más poder.