Los hogares de jóvenes mileuristas crecieron en Galicia un 30% desde el 2007

Cristina Porteiro
C. Porteiro REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Ana Escobar | EFE

El riesgo de pobreza entre menores de 35 años que viven con sus padres se ha duplicado

26 abr 2024 . Actualizado a las 16:54 h.

La precariedad no abandona el mercado laboral. Al menos en lo que atañe a los trabajadores con menos años cotizados. En Galicia, el número de hogares formados por jóvenes (menos de 35 años) mileuristas —con ingresos por debajo de los 1.500 euros—, ha aumentado casi un 31% su peso desde el 2007 —antes del estallido de la crisis financiera—, según los datos actualizados del Instituto Galego de Estadística (IGE). Hace 17 años, el 36% del total de los hogares jóvenes se encontraban en ese rango de ingresos. En el 2022 —último año para el que hay datos disponibles— ese porcentaje ha aumentado a casi el 50%.

La senda es muy distinta cuando se pasa la lupa a la cuota de familias jóvenes que ingresan entre 1.500 y 2.500 euros cada mes. Se ha desplomado un 26,3%. En el 2007, cuatro de cada diez (40,4 %) se ubicaban en esta franja. En la actualidad son tres de cada diez (29,8 %).

¿Quedan todavía familias jóvenes en Galicia que ingresen más de 2.500 euros al mes? Solo 14.624, un 37% menos que antes de la crisis financiera. Lo más habitual por aquellas fechas era que una familia joven ingresara entre 2.000 y 2.500 euros. Ahora la horquilla de ingresos más común está entre los 1.000 y 1.500 euros, seguida de cerca por la de menos de 1.000 euros.

Esto se traduce también en un mayor riesgo de pobreza entre los menores de 35 años que no viven con sus padres. La tasa se ha duplicado, pasando del 11,5 al 22,2 %. También se ha reducido el número de hogares jóvenes que tienen hijos, pasando del 37,6 al 28,4 %.

Emancipación tardía

La elevada rotación en el empleo y las dificultades de acceso a la vivienda están postergando la emancipación de los gallegos entre 18 y 24 años. A los coruñeses y ourensanos es a los que más les cuesta: el 57% de ellos todavía viven con sus padres —48 y 46% respectivamente en el 2007—. En Pontevedra (53,4%) y Lugo (52,4%), más de la mitad comparten también residencia con sus progenitores.

Otro dato revelador que pone en evidencia las dificultades de sobrevivir en Galicia aún siendo mileurista es que ha aumentado el porcentaje de jóvenes que cobran más de 1.000 euros y aún residen en el nido familiar. Han pasado del 20,7 a más del 27 % desde la pandemia.