Las futuras industrias anunciadas para Galicia precisarán de unos 1.200 megavatios para producir

Beatriz Couce, M.S.D. REDACCIÓN

ECONOMÍA

Varios proyectos industriales, como una central de bombeo y una planta de hidrógeno, se instalarán en el entorno del lago pontés
Varios proyectos industriales, como una central de bombeo y una planta de hidrógeno, se instalarán en el entorno del lago pontés CEDIDA

Las nuevas infraestructuras eléctricas se concentran en torno a los ejes de Vigo y Ferrolterra

16 dic 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

El informe manejado por la Xunta sobre las necesidades eléctricas de las futuras instalaciones fabriles de la comunidad apunta a una demanda conjunta de 1.200 nuevos megavatios para poder producir. Son inversiones que suman más de 6.000 millones de euros e implican la generación de 7.000 empleos. Las infraestructuras que desplegará el Ministerio de Transición Ecológica suman ese volumen de potencia, aunque se concentran fundamentalmente en torno a los ejes Vigo-Ferrolterra, frente a otros emplazamientos, como A Mariña y A Coruña, para los que el Gobierno autónomo también reclamaba nuevas instalaciones, y que no se recogen explicitadas en la revisión de la planificación eléctrica del Gobierno central hasta el 2026. 

Las factorías de química verde proyectadas para la comunidad son las que presentan las mayores necesidades energéticas. Así, las plantas de amoníaco verde del Grupo Ignis y Fisterra Energy previstas para la localidad coruñesa de Arteixo precisarán alrededor de 250 megavatios cada una, mientras que la que el grupo sueco Universal Kraft tramita para As Pontes, necesitará unos 120.

En este sector hay, no obstante, otras muchas intervenciones industriales anunciadas, como las plantas de hidrógeno de Reganosa, Naturgy y Repsol, en Meirama; y la de Reganosa y EDP, en As Pontes, que precisarán cada una de ellas cerca de 55 megavatios; la factoría de e-fuel impulsada por Greenalia y P2X Europe en Teixeiro (Curtis), con cerca de 80; y la de metanol verde de Forestal del Atlántico en Mugardos, bautizado como proyecto Triskelion, con una cifra similar.

La fábrica de grafito para la automoción que construirá Resonac en antiguos terrenos de Alu Ibérica necesitará también de 80 megavatios, idéntica cuota que el proyecto de Celsa Atlantic para poner en marcha una microacería en A Laracha.

Una de las inversiones más abultadas que se acometerá en la comunidad provendrá de la portuguesa Altri —cuantificada en unos 800 millones—, que requerirá de 110 megavatios, mientras que la factoría de Stellantis en Vigo necesitará de unos 56 megavatios adicionales.

El cupo de nuevos proyectos industriales con altas necesidades se completará con la bioplanta de Ence en As Pontes para recuperar fibras de papel y cartón y producir papel tisú, para lo que se precisarán otros 20 megavatios. 

Valoración de Stellantis

La llegada de la muy alta tensión era una demanda vital para la planta de Stellantis Vigo, porque de ella dependía la adjudicación de una nueva plataforma industrial, necesaria para fabricar la nueva generación de vehículos eléctricos a partir del 2026. Por eso la dirección de Vigo se felicitaba ayer por la modificación del Plan de Desarrollo de la Red Eléctrica para hacer posible la conexión del polígono de Balaídos a la red de muy alta tensión: «Agradecemos el apoyo que esta actuación ha tenido en distintos estamentos sociales, económicos y políticos. Es una infraestructura muy necesaria que contribuirá a la competitividad de la planta», declaró un portavoz.

El Ministerio de Transición aprueba las subestaciones que garantizarán el suministro eléctrico a las nuevas industrias gallegas

Era una necesidad contrastada para atender el ciclo reindustrializador que afronta Galicia y tendrá respuesta. El Ministerio de Transición Ecológica construirá tres nuevas subestaciones eléctricas en la comunidad y ampliará una cuarta, con una inversión global de 105,30 millones de euros, cerca de un tercio del montante global que prevé para este tipo de actuaciones en todo el país.

«Las necesidades asociadas a la transición energética y la electrificación y la digitalización de la economía están dando pie a la aparición de nuevos proyectos industriales de gran envergadura, de carácter estratégico, con gran capacidad de propulsar el crecimiento económico y el empleo. Muchos de ellos se caracterizan por conllevar unos consumos de electricidad significativos, razón por la cual se requiere su abastecimiento directamente desde la red de transporte eléctrica», subraya el gabinete de Teresa Ribera. Inversiones como las proyectadas por Stellantis en Vigo; Altri en Palas de Rei; Sentury Tire, Reganosa o Ence, en As Pontes; o Resonac en A Coruña, tendrán garantizado el suministro energético imprescindible para funcionar.  

El Ministerio de Transición Ecológica ha incluido esos nuevos proyectos en el revisado Plan de Desarrollo de la Red de Transporte de Energía Eléctrica para el 2026, para el que acaba de iniciar el trámite de audiencia, tras acometer las modificaciones pertinentes. En el conjunto del país ha introducido 64 nuevas intervenciones, con una inversión total de 321 millones de euros, con el objetivo de «facilitar la materialización de proyectos estratégicos para la descarbonización de la industria, la producción de hidrógeno, la integración de energía renovable, o el apoyo a la cadena de materiales y tecnologías clave vinculadas a la transición verde». 

En Galicia, el tendido que consumirá más recursos es la nueva estación de Nuevo Vigo, a la que se destinará 72 millones de euros. Tendrá entrada y salida en la línea Atios-Pazos de Borbén, de 220 kilovatios. Otros 20,3 millones de euros serán empleados en la construcción de una subestación en Ferrolterra, en Naraío (San Sadurniño), de 400 kilovatios, que estará conectada a través de doble circuito a otra nueva, también de 400 kilovatios, que será ubicada en Maciñeira (As Pontes). Acometer este último tendido consumirá 13 millones de euros. La infraestructura pontesa está llamada a prestar servicio también a la futura planta de Altri en Palas de Rei (Lugo), ya que tendrá conexión también con la línea Boimente-Mesón do Vento.

El Ministerio de Transición Ecológica subraya que en el área de As Pontes ha surgido la necesidad de conexión de un nuevo bombeo y consumidores adicionales desde la red de transporte eléctrica. «En dicha zona, la única subestación que cubre las necesidades de conexión desde la red de transporte es la subestación 400 kilovatios Puentes García Rodríguez (PGR). Sin embargo, la SE 400kV PGR no es ampliable y además no dispone de capacidad de evacuación de generación. Por esta razón, se propone una nueva subestación», se recoge en el documento. 

Por otro lado, se recoge también la ampliación de la subestación de 220 kilovatios de Meirama, aunque establece que no implicará coste alguno para el sistema.

Petición de la Xunta

El Gobierno autonómico había enviado, a finales del 2022, una petición al Gobierno central para que incluyese, dentro de la revisión de su planificación, la construcción de las nuevas infraestructuras, sin las que las industrias proyectadas no tendrían garantizada su viabilidad. 

Además de someter a audiencia las modificaciones de la planificación hasta el 2026 -que recogen aportaciones de las comunidades autónomas y de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia- el ministerio que dirige Teresa Ribera también anuncia que ya trabaja en la planificación para el período 2025-2030, «que será crítica para el cumplimiento de los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima».

Preocupación en la Xunta por las garantías de electricidad a Resonac y Altri

La conselleira de Economía, María José Lorenzana, pedirá aclaraciones y presentará alegaciones a las modificaciones realizadas en el Plan de Desarrollo de la Red de Transporte de Energía Eléctrica para el 2026. Y lo hará motivada, por un lado, por la preocupación existente por el suministro a dos de los grandes proyectos anunciados para la comunidad: el de fibras textiles de Altri en Palas de Rei y el de grafito para coches eléctricos de Resonac en A Coruña, y para reclamar que se eleve la inversión en infraestructuras eléctricas en este territorio.

Así, fuentes oficiales de la Consellería de Economía manifestaron su inquietud por la falta de concreción acerca de dos de las subestaciones que había reclamado al Ejecutivo central, la de Belesar-Mesón do Vento, de 220 kilovatios, y otra en Sabón. Por otro lado, aunque desde este departamento se reconoce que Galicia sale bien parada en esta última revisión, subrayan que distan mucho de alcanzarse los niveles de inversión que tendrían que corresponderle a la comunidad. En este sentido, afirman que la planificación inicial recogía para Galicia solo el 1,1 % del total, que se eleva ahora al 2,4 %, «pero territorialmente nos corresponde el 6 %». Insisten, por lo tanto, en que los recursos anunciados son insuficientes. 

Positividad socialista

El alcalde de As Pontes, Valentín González Formoso, se mostró especialmente satisfecho por la aprobación de la infraestructura para la antigua villa minera. «No teníamos preocupación para las primeras fases de los proyectos, pero sí inquietud de que pudiesen desplegarse en su totalidad sin ese suministro», recordó. No obstante, tras un trabajo «codo con codo» con el Ministerio de Transición —al que agradeció su sensibilidad—, se confirma una nueva subestación. «Es una magnífica noticia», subrayó, que garantiza el suministro para Reganosa, Sentury, Ence y Universal Kraft». Son proyectos industriales anunciados en el marco del proceso de transición energética en la localidad.

También en las filas socialistas ferrolanas se congratularon de los cambios introducidos en la planificación y que incluya una nueva subestación en el área de Ferrol, una «demanda que foi plantexada no seu día polo goberno municipal anterior, sendo Ángel Mato alcalde». Permitirá atender nueva demanda y otorgar seguridad al suministro.