El Concello promete a los vecinos actuar para intentar frenarlo
06 abr 2024 . Actualizado a las 05:00 h.El proyecto del parque eólico denominado Monte Xesteiros ha puesto en pie de guerra a los vecinos del valle de Vea, que han constituido una plataforma que integra a todas las parroquias afectadas, han abierto una propuesta en change.org para recabar apoyos telemáticos y han acudido al último pleno para pedir el respaldo del Concello, que les ha informado de que ha presentado un recurso de nulidad y que ante el contundente rechazo social hará todo lo posible para intentar frenarlo.
A los vecinos no les gusta ni el nombre del proyecto. Dicen que juega al despiste porque en la zona no existe ningún Monte Xesteiros y el Xesteiras, que está en Cuntis, no es el afectado. A quienes afecta en realidad este parque es a los vecinos de Frades, San Andrés de Vea, San Xurxo de Vea y Santa Mariña de Barcala. En estas parroquias se sitúa la poligonal, mientras que las líneas de evacuación, aunque poco se sabe de ellas todavía, se supone que discurrirán por Couso y San Miguel de Barcala.
El parque había sido solicitado por Norvento en el año 2010 pero hasta agosto no se presentó el anteproyecto. Entonces vecinos y asociaciones presentaron trescientas alegaciones y la la promotora eliminó dos de los ocho aerogeneradores previstos inicialmente, por su afección a mámoas y túmulos y el impacto visual sobre la iglesia románica de Santa Mariña de Barcala, situada a unos 800 metros.
Sin embargo, a los vecinos no les parece suficiente la medida. Recuerdan que la legislación sobre distancias a las casas fue modificada en el 2021 y estipula que los aerogeneradores han de estar al menos a una distancia equivalente a cinco veces la altura de los molinos. En el caso del parque Monte Xesteiros los aerogeneradores miden casi 200 metros. Los vecinos dicen que, rigiéndose por la nueva ley, seguramente no podría levantarse un solo aerogenerador en esta zona salpicada de aldeas en ambas laderas. Sin embargo, a Monte Xesteiros se le aplica la antigua ley que establecía una distancia mínima de 500 metros.
Los vecinos indican que en Frades hay casas que quedarán a solo 700 metros del pie del molino y subrayan que la iglesia románica de Frades quedará a 800. Están especialmente indignados con esta cuestión, ya que toda la aldea de Frades cuenta con una protección patrimonial que impide levantar nuevas edificaciones y vigila estrictamente las reformas. «Nós temos que construír as nosas casas noutra aldea e unha empresa pode vir e colocar un muíño de 200 metros a 800 metros da igrexa. Só teñen que reducir o impacto visual. ¿Como o van facer se a aldea está a 330 metros de altitude e o muíño a 515?», se preguntan.
Los vecinos también alertan de las afecciones a las traídas de agua particulares y vecinales y de los inconvenientes de la apertura de pistas para dar servicio al parque. Han presentado recursos de alzada pidiendo la paralización que están llegando denegados y anuncian un recurso contencioso. El Concello promete apoyo hasta donde pueda.