La cara nunca vista de la Rapa de Sabucedo

La Voz A ESTRADA / LA VOZ

DEZA

cedida

13 feb 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

La Rapa das Bestas de Sabucedo es mucho más que el cuerpo a cuerpo en el curro. Va incluso más allá de la subida al monte para reunir a los caballos salvajes que lo habitan. Hay una Rapa invisible que se extiende durante todo el año, que es casi una filosofía de vida y que es la que el productor y director Alejandro Enríquez ha querido retratar en la cinta Rapa. El Documental.

El director, que es oriundo de Vigo y reside en A Coruña, es un habitual de la Rapa desde hace años. No solo de la fiesta internacional que se celebra el primer fin de semana de julio, sino también de los trabajos que se desarrollan en el monte durante el largo invierno. «Eu veño botar unha man cando podo e dinme conta de que ninguén contara esa parte da rapa, que a min é a que máis me enganchou. A Rapa é unha escusa para contar o que pasa coas bestas durante todo o ano», explica Alejandro Enríquez. «Neste documental quería falar do que normalmente non se ve», añade.

En la cita se tocan inquietudes del día a día en la aldea, como los problemas por las incursiones de los animales en tierras de cultivo, el lobo, las actuaciones de los cuatreros o la amenaza eólica.

El documental empezó a gestarse en el 2018. Tras una parón a causa de la pandemia y muchas horas de esfuerzo, al fin está rematado y listo para su estreno a finales de marzo. El documental —que tiene una versión larga de dos horas para salas de cine y otra corta de poco más de 50 minutos para televisión— está a punto de cerrar el contrato con una agencia de ventas que lo moverá por todo el mundo. La historia de fondo es universal. «Fálase da falla de xente do rural, pero non desde a perspectiva tristeira da España baleirada, senón con algo positivo: a loita contra ese destino, as bestas como fonte de forza e enerxía para loitar contra ese destino», dice el director.

En A Estrada se programará un pase especial para los vecinos de Sabucedo en los Minicines Central.

La cinta, de la productora Mondotropo, ha contado con el apoyo de Agadic, la Deputación de A Coruña, Turismo de Galicia, la TVG (que ha comprado los derechos de emisión en gallego) y un inversor privado.