¿Cómo consiguió Arabia llevarse el Mundial del 2034?

Josema Loureiro / A. C. LA VOZ

DEPORTES

SAUDI PRESS AGENCY | REUTERS

Todos sus hipotéticos rivales acabaron renunciando a acoger una cita que volverá a tener que disputarse, posiblemente, en invierno

02 nov 2023 . Actualizado a las 10:25 h.

«El mayor espectáculo del planeta será organizado por Canadá, México y Estados Unidos en el 2026, en América del Norte. Las próximas ediciones de la Copa Mundial de la FIFA se celebrarán en África (Marruecos) y Europa (Portugal y España), con tres partidos de celebración jugados en Sudamérica (Argentina, Paraguay y Uruguay) en el 2030 y en Asia (Arabia Saudí) en el 2034. Tres ediciones, cinco continentes y diez países involucrados en la organización de partidos del torneo. Eso hace que el fútbol sea verdaderamente global».

En estas manifestaciones de Gianni Infantino, presidente de la FIFA, se encuentran las claves de cómo Arabia Saudí consiguió llevarse el Mundial del 2034.

¿Cómo ha conseguido Arabia Saudí el Mundial del año 2034?

Para entenderlo, hay que retroceder hasta el año 2007. Fue entonces cuando la FIFA articuló una norma de rotación para que una confederación organice un Mundial tienen que disputarse dos en medio desde que celebró el anterior.

Así las cosas, en el 2026 le toca el turno a América del Norte (Canadá, México y Estados Unidos) y para el 2030 pujaban Europa y África por un lado (la candidatura hispano-lusa-marroquí) y por otro Sudamérica (también una apuesta de varios países).

Esta última se retiró con la idea de colocarse para el 2034. Pero ahí intervino el órgano rector del balompié internacional, que decidió que Paraguay, Argentina y Uruguay participaran en la cita del 2030, organizando los tres encuentros inaugurales. ¿Qué consiguió de esta manera? Que para el 2034 no pudiera celebrarse ni en Europa, ni en África, ni en Sudamérica, ni en Norteamérica. Así las cosas, solo quedaban Asia y Oceanía.

De entre los países que integran estos dos continentes, destaca el nombre de Australia, que, paradójicamente, pertenece a la confederación asiática. Su pertenencia a este ente descarta a Oceanía como organizadora, dado que es el único país en este entorno con capacidad de organizar una Copa del Mundo masculina. Por ello, el país oceánico apuesta por una alianza con Indonesia para hacerse cargo del Mundial del 2034. Se vive entonces otro episodio sorprendente, cuando este país del sudeste asiático deja en la estacada al gobierno de Camberra.

Coincide este hecho con una reunión entre representantes de la monarquía saudí y de la república indonesia. Y ahí es cuando, de nuevo, salta la sorpresa. Este martes, Australia anuncia que se retira y a las pocas horas, Infantino señala a Arabia como organizador.

«Hemos analizado la posibilidad de presentar una candidatura para albergar la Copa del Mundo y, tras tener en cuenta todos los factores, hemos llegado a la conclusión de no hacerlo para el 2034. Football Australia mantiene su compromiso de contribuir positivamente al crecimiento y éxito del fútbol en todos los niveles. Deseamos a la FIFA y a los eventuales anfitriones de la Copa Mundial 2034 el mayor de los éxitos por el bien del deporte y de todos los que lo aman». Este comunicado de la federación oceánica, cuando aún no se sabía que ya había elección a favor de Arabia, deja entrever las presiones que se han deslizado que han sufrido los rectores del balompié de esta nación.

Fue la avanzadilla de lo que, en la noche de este martes, se confirmaría. Junto a este hecho, la FIFA decidió unificar los procesos de presentación de candidaturas hasta el pasado 31 de octubre, hecho que, sin dejar fuera de forma directa a otras propuestas, sirvió para brindar una alfombra roja a los saudíes, prevenidos de ello, para seguir adelante con su Mundial.

Con un plazo de apenas días para postularse para una Copa del Mundo que se celebrará a once años vista, Arabia se queda sola y, a falta de que oficialice su candidatura, una monarquía totalitaria reinará en el fútbol mundial.

¿En qué circunstancias se va a jugar?

Dadas las altas temperaturas que caracterizan los veranos en dichas latitudes, todo apunta a que el Mundial del 2034 redundará en las circunstancias del torneo celebrado en Catar, disputándose en invierno.

En el país saudí se registran temperaturas que exceden los 40 grados en los meses de junio y julio, en los que habitualmente tienen lugar dichos torneos.

¿Es definitiva la elección de Arabia Saudí como país organizador?

Se trata de un caso similar al del Mundial del 2030. Puesto que los plazos para confirmar las candidaturas todavía están muy lejos, la decisión aún no es oficial, pero sí oficiosa. Con todo, el consejo del ente rector del fútbol mundial aprobó por consenso los procesos de puja relativos a las tres citas, «en busca de un símbolo de inclusión y unidad».

Si bien para el Mundial del 2030 los plazos definitivos se prolongan hasta el segundo trimestre del año 2024, el caso de la siguiente cita deberá esperar hasta, como mínimo, el 2027. Siguiendo los ejemplos recientes, la respuesta definitiva de la FIFA debería llegar en el mes de diciembre del 2028.