Un vecino intercepta a dos ladrones vestidos de fontaneros que intentaron robar en una vivienda habitada de la avenida de Oza, en A Coruña

F. Molezún A CORUÑA

A CORUÑA CIUDAD

Cedida

Su actuación permitió que la policía los detuviese en la calle Perpetuo Socorro

13 mar 2024 . Actualizado a las 13:35 h.

Iban ataviados con dos monos de trabajo azul y bolsas cargadas de herramientas cuando poco antes de las 10 de la mañana intentaron entrar por la fuerza en una vivienda habitada del número 12 de la avenida de Oza. Los residentes dieron la voz de alarma y los ladrones echaron a correr. «Oímos a una vecina de los pisos de arriba que empezó a gritar, pero al principio no se le entendía. Después ya oímos claramente que decía "¡al ladrón, al ladrón!"», explicó una de las trabajadoras del psicotécnico San Cristóbal que se encuentra en la entreplanta del edificio que los cacos intentaron allanar en la zona de Cuatro Caminos. 

La casualidad hizo que un policía se encontrase allí para renovar su permiso de conducir y, al percatarse de lo que estaba sucediendo, no dudó en salir tras los cacos a la carrera. «Salió disparado por las escaleras. Abajo lo estaba esperando un compañero y a los diez o quince minutos ya los cogieron», comentó la empleada. Los falsos fontaneros dejaron tirada una de las bolsas de herramientas que portaban en la calle Alcalde Marchesi y continuaron su huida callejeando en dirección hacia la calle Marqués de Amboage. Fue un ciudadano que estaba por la zona el que propició su detención, ya en la calle Perpetuo Socorro. «Venía vestido de fontanero y con una pata de cabra en la mano, pero ¿qué iba a hacer? La policía venía detrás. Yo lo tenía de frente y lo cogí. Lo primero que hice cuando estábamos en el suelo fue quitarle la pata de cabra. Después me apoyó más gente hasta que llegó la policía», explicó el hombre que frustró la huida en el programa Voces de A Coruña, de Radio Voz. A pesar del forcejeo y la caída, no tuvo lesiones de consideración, «solo algunos rasguños en la mano y poca cosa más». 

El otro ladrón fue retenido por otros ciudadanos que también colaboraron en la persecución unos metros más atrás. Varias patrullas de la Policía Local y Nacional se personaron con rapidez en la zona y detuvieron a los dos ladrones, que fueron trasladados a la comisaría de Lonzas. El suceso causó un gran revuelo y obligó a cortar al tráfico la vía hasta las 10.40 horas.

«Abrimos a las 8.30 horas y no escuchamos nada hasta que la vecina, con un susto tremendo en el cuerpo, empezó a gritar. No sabemos si se colaron por la noche o aparecieron ahora por la mañana», añadieron desde el centro psicotécnico.