Bereket: chuletones de las mejores vacas y bueyes y platos de nivel elaborados con acierto

Tamara Rivas Núñez
Tamara Rivas A CORUÑA

A CORUÑA CIUDAD

Por la brasa, eje central de su propuesta, pasan piezas seleccionadas de carne y pescados de la máxima calidad

27 ene 2024 . Actualizado a las 21:58 h.

Ponen auténtico mimo y cuidado en cada pieza de carne que pasa por sus brasas y recurren en todos sus platos a productos de la máxima calidad, dos requisitos básicos para lograr el objetivo que se marcaron en Bereket (en turco, carne en abundancia) cuando abrieron sus puertas hace cuatro meses: convertirse en el mejor asador de Galicia. «Traemos los mejores productos y los servimos de la manera más natural y transparente posible. No nos gustan los platos con salsas muy superpuestas o retorcidas que acaban por disfrazarlos», explica Roi Muñoz, gerente del espacio. Detrás de este negocio están Tolga Saím y Félix Lux, de MeerMeat, la distribuidora que abastece a la alta hostelería europea con la mejor carne de Galicia. Es el segundo de ellos el encargado de hacer llegar «los bombones, las vacas más top» directamente hasta las brasas de carbón de marabú sobre la que gira la propuesta gastronómica de Bereket. Los chuletones de wagyu, buey y vaca vieja origen —la denominación engloba a diferentes razas gallegas y del norte de Portugal como pueden ser la rubia, minhota, barrosa, frisona, maronesa…— son su gran reclamo. «Puede que el wagyu sea el animal en el que se encuentra el mejor equilibrio entre textura y sabor. Es quizá la vaca más tierna. Pero donde esté un buey con una maduración alta… eso es puro sabor», comenta Muñoz.

El secreto para que los chuletones lleguen perfectos hasta la mesa pasa por un buen atemperado previo, de un par de horas, —«tiene que perder todo el frío que traen de la cámara y como son piezas tan grandes, puede parecer que por fuera ya están, pero todavía tienen frío en el centro, de ahí ese tiempo», matiza el gerente—, buen ojo y mimo en la brasa. Para quien no quiera chuletón, pero sí carne, pueden elegir entre solomillo o tomahawk de wagyu, rib eye de vaca vieja danesa, o una hamburguesa a la que el nombre no le hace justicia. La preparan con lomo alto madurado de vaca cortado a cuchillo, queso cheddar, pepinos encurtidos y una mayonesa de la casa con multitud de ingredientes y una receta secreta. «Es una hamburguesa, pero realmente sabe a chuletón», resume el gerente. 

La carta cuenta con dos opciones de pescados, un exquisito bacalao a la brasa, que sirven acompañado de una shakshuka, una especialidad turca tradicional a base de berenjena, pimiento, tomate, patata y orégano hirtum (la receta es de la madre de Tolga Saím), o un entrecot de atún rojo que apenas toca el fuego y va acompañado de salsa yakitori, cama de aguacate, códium y romescu. Un plato fresco y moderno.

Los entrantes mantienen el nivel, con opciones entre las que resulta complicado elegir. Las croquetas de carabinero y erizo, melosas e intensas de sabor (han incrementado la cantidad del crustáceo de la receta), la flor de alcachofa a la brasa con crema de tomates y ajos asados, gel de piquillo y cecina crujiente, o el steak tartar nunca fallan. «Lo va a elaborar el camarero en mesa para que el cliente disfrute del proceso. Se corta a cuchillo solomillo de wagyu y se adereza con pepinillo, alcaparra, cebolleta, yema de huevo, pimienta negra, aceite de oliva, sal, mostaza, salsa worcestershire  y un punto de vodka que le va bien. Si el cliente quiere, se le pone un punto picante», explica Muñoz. 

El broche dulce lo ponen cuatro propuestas de lo más golosas y resultonas, en las que el flao (una especie de tarta de queso) seguirá siendo la estrella. Aunque el banoffee de plátano caramelizado con caramelo salado, crumble y helado de nata y la tarta de cerveza negra con crema de aguacate y helado de leche merengada no desmerecen. La bodega, justa y completa, está llena de vinos de gama media alta —los hay desde 17 a 1.700 euros— con los que resulta fácil maridar cualquier plato. «Valbuena 5.º (195 €), Vega Sicilia Único (510 €), o Alabaster (240 €) van saliendo, pero para vender un Pingus 2016 (1.700 €) tiene que llegar el perfil de cliente concreto», comenta Luis Canosa, responsable de la bodega. 

MENÚ RECOMENDADO

- Jamón curado de lomo alto.

- Ensalada templada de queso feta y melocotón a la brasa.

- Chuletón de vaca vieja Origen.

- Banoffe de plátano con caramelo salado, crumble y helado de nata.

- Precio para 2 personas: 140 € aproximadamente, bebida aparte. 

Rampa Matadero, 10 / De 13.00 a 16.00 y de 20.30 a 24.00. Cierra los lunes, los domingos para cenas y martes al mediodía / 611 235 557?