Luísa Villalta y la música

Alfonso Andrade Lago
Alfonso Andrade CRÓNICAS CORUÑESAS

A CORUÑA

RAG | EUROPAPRESS

La artista coruñesa realizó una brillante reflexión sobre la esencia del arte en un artículo publicado por La Voz de Galicia en 1982

03 feb 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Tanto como la Luísa Villalta poeta me interesa la Luísa Villalta violinista, y en particular sus reflexiones sobre la música y sus esfuerzos por explicar —casi por descifrar— los mecanismos profundos de un arte indescifrable en el que los sonidos, «con ser a matéria prima e indiscutibelmente necesaria, non son o elemento básico». Para Villalta, el elemento clave de la música es el tiempo, el juego temporal, «e, precisamente, nisto reside a sua condición artística».

Así lo explicaba en La Voz de Galicia el 21 de febrero de 1982 la entonces joven escritora coruñesa a la que este año está dedicado el Día das Letras Galegas. Su extraordinario artículo A música como arte lo recogió el suplemento Fugas el pasado 26 de enero.

Villalta, en ese juego temporal, explora el misterio de la superposición de melodías en la lectura vertical de la partitura y en las leyes «da armonía», que, en contraposición con la melodía, «preséntase en sentido vertical atinxindo só os sons que se producen ao mesmo tempo».

Y sobre esas normas de dominio del tiempo, el aporte de la estética, que domestica la música para crear un misterio todavía mayor, y más complejo cuando se aplica a la polifonía de una orquesta sinfónica o de una banda, en las que la armonía habrá de encajar en el puzle y la matemática de decenas de instrumentos.

Pero Villalta toca otra clave de este arte tan maravilloso como inefable: la abstracción. A todos esos detractores del arte abstracto habría que preguntarles si les gusta la música. No hay arte más abstracto, porque ¿qué es la música en definitiva? ¿Ese tiempo que intenta dominar y explicar Luísa Villalta? Tal vez «ese cariz de subxectividade que impón, en último término, a particular visión do artista».