Rafael Mouzo, sobre Emerito: «Creo que quería morrer e ser enterrado en Fisterra»

Acogió el Bela Fisterra en la calurosa tarde del viernes, y pese a ello nutrida de público, una nueva presentación de la obra Desiderio Pazo Figueroa, don Emerito, tercer volumen de la Biblioteca da fisterranía que coordina Modesto Fraga, a quien definió Pepe Fermoso como «un membro máis da familia do Bela». Estuvo acompañado por Rafael Mouzo, excalde de Corcubión y hombre hondamente comprometido con la cultura, como recordó el escritor.

Emerito (1884-1968) era de Corcubión, precisamente, aunque a lo largo de la conversación-presentación reivindicó Mouzo también su identidad fisterrá: «Era médico, e os médicos como funcionarios públicos teñen dereito de trasladarse cando había concursos, el nunca quixo saír de Fisterra. Morreu na humildade, querendo a Fisterra, tamén a Corcubión, pero a Fisterra. Temos unha débeda forte con el, que ten que facer Fisterra e tamén Corcubión (...) Non fixo fortuna ningunha (...), eu creo que quería morrer en Fisterra, e ser enterrado en Fisterra (...) Sería extraordinario que descansasen aquí os ósos dos dous», abundó Mouzo, refiriéndose también a los de su esposa, Jesusa.

Humanista, polifacético autor, hombre de teatro, promotor de una banda de música, padre del entroido fisterrán, referencia de la Semana Santa, comprometido socialmente... Recoge esta obra de Fraga mucho de lo que aportó Desiderio al fin del mundo, y parte de ello se expuso en el Bela, donde Modesto reivindicó de nuevo que la Praza da Constitución fisterrá pase a llamarse Don Emerito.

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