El recurso a las viviendas turísticas se redujo, en cambio, un 7 % este verano
17 sep 2023 . Actualizado a las 17:12 h.O Salnés mantuvo este agosto unas cifras de ocupación similares a las del verano pasado, a pesar, según cuentan algunos hosteleros, de que no fuese ya año xacobeo y las previsiones de entrada no fueran tan optimistas. El perfil de cliente fue en su mayor parte nacional, aunque hubo un 18 % que procedían del extranjero, principalmente de Portugal, Francia, Alemania e Italia. Eso es lo que reflejan los datos recogidos por Turismo Rías Baixas de la Diputación de Pontevedra, presentados esta misma semana.
Cabe destacar que la ocupación fue similar a la del 2022, alcanzando de media el 90%.
Entre las preferencias de alojamiento, un 86,4 % escogieron establecimientos hoteleros para instalarse, un 90,5 % lo hicieron en negocios de turismo rural, y otro 90,5 % optaron por los cámpings, que experimentaron un crecimiento de un 1,5 %. Donde se observa una caída es en la ocupación en viviendas turísticas, ya que en agosto del 2022 fue del 100 % y este año bajó al 93%.
Las estancias fueron en agosto algo más largas que en el mes de julio: un 27 % de quienes visitaban la zona permanecían entre siete y quince días, y un 20 % lo hacían de cuatro a seis días. El balance realizado por la entidad provincial refleja, además, dos datos interesantes: que el 46 % de los visitantes llegaban atraídos por la oferta de ocio, y un 20 % lo hacían por motivos culturales. Además, un 76% de los turistas que llegaron a la provincia no conocían el destino con anterioridad.
El fenómeno en O Grove
O Grove, una de las potencias turísticas de la comarca, avala estos datos, tal y como reconocen las propietarias de algunos establecimientos de la zona, que perciben también la llegada tímida de algunos extranjeros, «alemanes, ingleses y suizos», explica Raquel Costa desde el Hotel Montemar, donde cerraron agosto con una ocupación media del 85%. Para Beatriz Castro, de Cons da Garda, la cifra es casi idéntica a la del 2022, un 89,4 % «a pesar de que a previsión era menor, porque o ano pasado foi como un Xacobeo estendido», señalaba, aunque sí reconoce que julio no fue lo que esperaba. A pesar de ello se muestra satisfecha con el balance general. Parece que las tendencias cambian en cuanto al consumo extra, reconoce Castro que en torno a un 40 % en relación con el año anterior, al menos en su caso particular.
El balance del verano es bueno, pero lo que sorprende, al menos en O Grove, es la afluencia de visitantes este septiembre, algo con lo que no contaban. Pese a las previsiones meteorológicas con lluvias y tormentas que no acaban de aterrizar, el número de visitantes ha pillado a algunos desprevenidos. Las terrazas de bares y restaurantes siguen estando llenas por mucho que haya empezado el curso escolar para fortuna de muchos hosteleros, que esperan mantener el tirón hasta la Festa do Marisco.