La Diócesis y Cáritas de Mondoñedo-Ferrol invitan a marcar la doble «X» en la declaración de la renta frente a la exclusión social

María Cuadrado Fernández
M. CUADRADO FOZ / LA VOZ

FOZ

Pepa Losada

El obispo y la secretaria general de Cáritas presentaron en Foz la campaña «No cuesta nada ayudar X dos» para impulsar y continuar con proyectos sociales. Atienden a 5.000 familias en la diócesis

03 abr 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

La diócesis de Mondoñedo-Ferrol y Cáritas Diocesana de Mondoñedo-Ferrol presentaron este martes en Foz la campaña «No cuesta nada ayudar X dos», con la que, por segundo año consecutivo, invitan a los ciudadanos a marcar la doble «X» (Iglesia católica y fines sociales) en su declaración de la Renta 2024.

Un día antes de que este miércoles empiece el plazo de presentación por internet, el obispo Fernando García Cadiñanos y Marta Pazo, secretaria general de Cáritas diocesana, participaron en un acto con amplia representación de voluntarios y de colaboradores celebrado en los locales parroquiales en el que recordaron la importancia de este gesto para contribuir a financiar acciones y servicios que se prestan en las 422 parroquias de la diócesis, donde viven 275.000 habitantes y atienden 90 sacerdotes. La secretaria de Cáritas apuntó que la diócesis atendió en 2023 a unas 4.700 familias, cifra que sigue aumentando, rozando las 5.000.

El obispo animó a marcar la doble casilla «sabiendo que es un ejercicio de libertad, de democracia fiscal (...) Tenemos que ser conscientes de que abrir la Iglesia y Cáritas suponen un coste, unos gastos», citando los de servicios como la luz, el agua, la calefacción, los seguros, traslados de sacerdotes...

Repasó cuáles son las cuatro vías de financiación de la Iglesia; las aportaciones y donativos de los fieles, la tarea de los voluntarios que entregan su tiempo sin percibir retribución, la derivada de la actividad de gestión de mobiliario y fondos, y la de la declaración de la Renta: «En 2022 nuestra iglesia diocesana a través de la asignación tributaria recibió 2.118.000 euros, un importe que supone cada año entre el 65 y el 70 % del presupuesto de nuestro obispado», indicó. Recordó que en la campaña del 2023 se realizaron en la provincia lucense 38.981 declaraciones con asignación a favor de la Iglesia Católica (un 22,68 % frente al 23,95 % de la provincia de A Coruña) con un importe de 1.188.853 euros, lo que representó un ligero incremento con respecto a la anterior: 37.934 declaraciones (22,66 %) y 1.056.216 euros.

El obispo recalcó que las asignaciones tributarias ayudan a financiar la cobertura de necesidades sociales, a atender a colectivos vulnerables, a abonar salarios de sacerdotes, mantienen el patrimonio... Considera relevante «apoyar el trabajo que la Iglesia realiza en favor de la sociedad» y destacó la importancia de identificarse con el trabajo de la Iglesia, citando a modo de ejemplo la relevancia que representa socioeconómicamente la Semana Santa «más allá de lo que es la celebración creyente».

Defendió que los recursos de la Iglesia «son gestionados de manera clara, austera y transparente», pero considera que se podrían mejorar las cifras de la asignación tributaria en la provincia, «donde está muy por debajo de A Coruña u Ourense». Afirmó que esta situación, partiendo de las buenas relaciones entre la Iglesia y la ciudadanía, le llamó la atención cuando llegó a la diócesis procedente de otra región. Cree que pueden influir varios factores, desde que no se hizo suficiente promoción en la provincia a desconocimiento «o por la costumbre de no cambiar lo que se venía haciendo, más que por una decisión de no colaborar».

46 familias en la UPA de Foz

La secretaria de Cáritas diocesana recordó que se otorgaron ayudas de emergencia, se prestó atención a inmigrantes, se dio acompañamiento a personas mayores... : «En 2023 el 22,7 % de los recursos invertidos en la acción social de Cáritas provenían de la Iglesia». Afirmó que todas las personas que llegan a Cáritas «lo hacen a través de las parroquias» e indicó que la unidad pastoral de Foz acogió en 2023 a 46 familias (con 34 niños), el 50% de ellas de migrantes; recordó que desde 2021 se da clase de español a mujeres migrantes y desde 2023, en colaboración con la Fundación San Aníbal, funciona el programa «Familia Educa», del que se benefician 31 niños/adolescentes que acuden cada semana.

Dos profesoras voluntarias dan clase a madres migrantes y a sus hijos: «Es muy gratificante»

Entre los fines y los servicios sociales que presta la Iglesia en la diócesis, este martes se ensalzó el trabajo que realizan voluntarios que participan en Foz en varios proyectos educativos. En el acto con el obispo estuvieron presentes Dolores Nécega y Dolores Pena, profesoras voluntarias del programa de refuerzo socioeducativo. Imparten clases de español y de alfabetización, respectivamente.

Dolores Nécega explicó cómo evolucionan las clases de español que imparte desde noviembre de 2021 a mujeres migrantes, marroquíes concretamente. Tras dedicarse a la enseñanza, en esta etapa como jubilada afirmó que decidió embarcarse en esta nueva misión: «Vine con respeto porque me parecía que era complicado». Empezó impartiendo clase dos horas a la semana a un grupo de 10 o 12 mujeres, que hoy son 5 o 6 «y algún día pueden aparecer ocho». Reconoció las dificultades para avanzar por los diferentes niveles educativos y por, entre otros motivos, la dificultad de conciliar las clases con las ocupaciones familiares de las alumnas. Dolores confesó su satisfacción y manifestó que «siempre me sorprendió gratamente lo agradecidas que están todas ellas».

«No me canso de estar con ellos»

El otro testimonio lo aportó Dolores Pena (Hermana Lola) que tras dedicarse a la enseñanza en Trujillo (Cáceres) se inició en Foz impartiendo clases de refuerzo a doce niños (a partir de 4 años). A pesar de la diferencia de niveles —apunta— «todos vienen con entusiasmo y ganas de aprender». Confiesa que para ella es una experiencia «muy gratificante. No me canso de estar con ellos».