Los republicanos arremeten contra Obama por recurrir la ley de Arizona

Victoria Toro NUEVA YORK/LA VOZ.

INTERNACIONAL

El Gobierno mexicano felicita al de Barack Obama por presentar la demanda

08 jul 2010 . Actualizado a las 02:03 h.

Los republicanos acusan a Obama de actuar contra los estadounidenses que defienden su país. Esta vez, a causa de la demanda que el Departamento de Justicia presentó el martes contra la ley SB1070, conocida como ley Arizona, para que se declare inconstitucional. Veinte legisladores republicanos enviaron el mismo martes una carta al secretario de Justicia en la que dicen que la demanda revela «el desprecio del presidente Obama no solo por las leyes de inmigración y los ciudadanos de Arizona, sino también por la mayoría del pueblo estadounidense que apoya los esfuerzos de Arizona».

La ley contra la inmigración aprobada en el estado fronterizo con México permite a la policía interrogar por el estatus migratorio a cualquier persona sobre la que tengan una sospecha razonable de que es un inmigrante sin visado. Según han denunciado los grupos de defensa de los derechos humanos, en la práctica la ley permite que la policía interrogue a cualquier hispano solo por su apariencia.

El ex candidato republicano a la presidencia y senador por Arizona, John MacCain, también ha criticado la decisión del Gobierno de Obama. Según McCain, Obama se dedica a demandar a un estado, Arizona, que solo trata de proteger a su gente, en vez de centrarse en la seguridad fronteriza. Y ese es el tono general de todas las críticas republicanas.

Por su parte, los demócratas no se han manifestado en público en defensa de la decisión de Washington y han dejado que sean los miembros del Gobierno los que hablen sobre la demanda. Solo el senador demócrata de origen cubano Mel Menéndez afirmó ayer que «la ley sienta un peligroso precedente que pone incluso a los ciudadanos y residentes con visado en peligro de ser perseguidos por su apariencia racial».

Pero, a pesar de las palabras de Menéndez, no ha sido el argumento racial el que utiliza la demanda del Ejecutivo de Washington contra la ley Arizona. La denuncia presentada por el Departamento de Justicia argumenta que de entrar en vigor, dicha ley desviaría muchos recursos federales en el control de ciudadanos que no habrían cometido ningún delito, lo que significaría que disminuirían los que se utilizan para perseguir el crimen y la ilegalidad. Argumenta también que el Gobierno federal tiene preeminencia sobre los gobiernos estatales a la hora de legislar sobre inmigración.

Esta denuncia presentada el martes por Washington se suma a otras cinco ya admitidas por el tribunal y formuladas por diferentes grupos de defensa de los derechos humanos. Las primeras vistas de estas denuncias serán el 15 y el 22 de julio. Según comunicó ayer el Departamento de Justicia, Washington espera que en alguna de ellas el tribunal se pronuncie también sobre la del Gobierno federal.

Lo primero que se pide es que se suspenda la aplicación de la ley mientras los jueces deciden sobre su constitucionalidad. De no ser así, la ley Arizona entrará en vigor el 29 de julio.

A una de esas cinco denuncias contra la norma antiinmigración, se sumó como demandante el Gobierno de México. Pues, aunque las autoridades de este país afirmaron que respetan la autonomía de los estados para dictar sus leyes, alegan que la ley Arizona criminaliza a miles de mexicanos inocentes y que su responsabilidad es la de oponerse.

Además, el Ejecutivo mexicano hizo pública su felicitación al gobierno de Barack Obama por la presentación el martes de la demanda contra la ley.