La Fundación S'Olivar e Inshuti están subvencionadas por el Gobierno balear
26 nov 2009 . Actualizado a las 02:00 h.Guerrilleros hutus ruandeses que operan en el este de la República Democrática del Congo (RDC) organizaron una red de financiación y apoyo internacional que hizo fracasar todas las tentativas de neutralizarlos, afirma un informe de expertos de la ONU. Recibieron, entre otros, el apoyo de dos oenegés religiosas españolas y lograron exportar minerales que compraron firmas británicas, malasias y tailandesas.
Los rebeldes, refugiados en el este del Congo desde el genocidio contra la minoría tutsi en Ruanda (1994), se agruparon en el año 2000 en las Fuerzas Democráticas de Liberación de Ruanda (FDLR), acusadas de crímenes de guerra y del reclutamiento de niños soldado.
Los expertos citan entre los grupos que apoyan a las FDLR a miembros de la Fundació S'Olivar y de Inshuti, oenegés españolas que están «financiadas por el Gobierno balear». Citando a un oficial de las FDLR, el informe indica que el presidente de Inshuti, Joan Casoliva, que tenía contactos en el Gobierno balear, había prometido «colectar hasta 200.000 dólares para las FDLR» y habría hecho llegar fondos a los rebeldes con la ayuda de un sacerdote belga destinado en Tanzania.
El Gobierno balear reaccionó afirmando que la Fundación S'Olivar actuó siempre «en defensa de la paz, la justicia». Inshuti no pudo ser contactada.