El sacerdote benedictino de Tui, que trajo a Galicia las primeras semillas de eucalipto, puso la primera piedra del templo católico de Perth en el año 1863
28 nov 2009 . Actualizado a las 03:26 h.El 8 de febrero del año 1863, el sacerdote benedictino Rosendo Salvado ponía la primera piedra de la catedral católica de Perth, en el oeste de Australia. El próximo 8 de diciembre, el arzobispo Barry J. Hickey presidirá la inauguración de la catedral iniciada hace 146 años. Ese día, un grupo de religiosos gallegos acudirán a los actos de celebración previstos en el hemisferio sur.
Fray Rosendo Salvado nació en Tui en 1814, pero su afán evangelizador lo llevó hasta el occidente australiano, donde dejó una profunda huella al ser el primer europeo que consideró y defendió los derechos de la población aborigen, por entonces despreciada en dicho país. El paso del sacerdote tudense por Australia tuvo también una importante consecuencia medioambiental para Galicia ya que fue Rosendo Salvado quien introdujo en nuestra comunidad las primeras semillas de eucalipto. Fue durante una visita que realizó a su casa natal, en el año 1860.
Los vínculos de Rosendo Salvado con su patria chica nunca se rompieron y algún autor mantiene que en 1898 aún recibía, en el otro extremo del planeta, La Integridad , periódico bimensual católico editado en Tui entre 1888 y 1925. El obispo de la ciudad australiana de New Morcia murió en Roma, pero está enterrado en Australia.
La catedral de Perth se realizó en tres fases, siempre marcadas por la falta de los fondos necesarios para concluir el proyecto.
Edificio humilde
La primera parte concluyó en 1865, aunque se trataba de un edificio humilde. Ya en el siglo XX se afrontó la construcción de un edificio de estilo histórico, que diseñó el arquitecto Michael Cavanagh después de mantener una polémica estilística con otros sectores de la comunidad que apostaban por reproducir algunos cánones románicos. Este proyecto no se pudo concluir debido a la gran depresión que se originó en todo el mundo con el crac de 1929.
Con pequeños arreglos, la antigua iglesia aguantó hasta 1999, año en el que el Arzobispado de Perth recibió una donación de dos millones de dólares australianos. Con este dinero y la ayuda del estado de Australia Occidental, en agosto del 2006 se iniciaron las obras definitivas de este templo que se inaugurará en apenas dos semanas.
El edificio fundado por el fraile Rosendo Salvado conserva parte de la estructura realizada en los años veinte, que se corresponde con el ábside y uno de los dos campanarios. El resto del templo se ha construido en los tres últimos años.
Coste millonario
Aunque el proyecto final fue iniciado con un presupuesto de partida de tres millones de dólares australianos, en el año 2007 los trabajos de recuperación de la catedral ya habían superado los cinco millones y se calcula que su finalización puede rebasar los 32 millones de dólares. Gran parte de este dinero ha sido reunido a través de las donaciones de la comunidad católica residente en el país oceánico.